Recibí desde Europa un correo electrónico de una amiga originaria de Guantánamo. En él me suelta una protesta contra los periodistas porque solo mencionamos su provincia en relación con el campo de prisioneros de la base militar de Estados Unidos.
Nunca lo había pensado pero debe ser irritante decir dónde uno nació y que todos piensen en ese agujero negro con presos de mono naranja, provenientes de distantes y diversos parajes, para los que no existen los Derechos Humanos.
En realidad los militares estadounidenses y sus prisioneros solo ocupan una ínfima parte del territorio de Guantánamo pero mi amiga me hace notar que tienen más espacio en los medios que todo el resto de los habitantes de la provincia.
Imagino que a ella le debe haber cambiado el humor al leer The New York Times (NYT), donde se acaba de proponer que el presidente Barack Obama devuelva a Cuba el territorio de la base, ocupado desde hace más de 100 años.
En el artículo, el profesor de Harvard Jonathan Hansen reconoce que “pocos gestos tendrían un efecto más saludable en el sofocante callejón sin salida de las relaciones cubano-estadounidenses, que la devolución de esta pieza codiciada de tierra”.
Agrega el NYT que en 1901 Washington “obligó a Cuba a arrendar la bahía de Guantánamo como una base”, algo que “ha servido para recordar al mundo la larga historia del militarismo intervencionista de Estados Unidos”.
Recuerda el “presagio profético” del líder independentista cubano Juan Gualberto advirtiendo que las bases extranjeras solo traerán a Cuba “conflictos que no saldrán de nuestras propias decisiones y en los que no tenemos ningún interés”.
Hansen trata de explicar a sus compatriotas los sentimientos que provocó en los cubanos la política de EE.UU. durante el proceso de independencia de Cuba y lo hace comparándolo con su propia historia independentista.
“Imagínese que al final de la Revolución Americana los franceses hubieran decidido permanecer aquí, que hubieran impedido que Washington y su ejército asistieran a la tregua en Yorktown y le negaran en el Congreso Continental un asiento a los estadounidenses”.
Es durante la ocupación militar que Cuba “cede” la base naval, “consiente” desarmar al ejercito mambí y “acepta” incluir en la Constitución de la República una enmienda que da derecho a EE.UU. a invadir la isla cada vez que quieran.
Pero no todos hablan mal de la base militar de Guantánamo. Un periódico de Miami publicó un artículo que la describe como un simpático pueblecito con estación de radio, Mc Donald y tiendas de subvenir con caricaturas de Fidel Castro.
Asegura que los que allí habitan se burlan del ex presidente por pedir desde 1960 que devuelvan el territorio de la base a Cuba. Pero lo cierto es que el problema es muy anterior, en 1901, cuando entraron en Guantánamo, Fidel Castro no había nacido.
Explican que es “una ubicación altamente estratégica. De modo que la Marina de Guerra la mantiene como un pueblecito con puerto, cárcel y pista de aterrizaje, con unos 6.000 ocupantes entre tropas, contratistas estadounidenses, cónyuges e hijos”.
Curiosamente se les olvidó mencionar a los 170 prisioneros que retienen allí contra la voluntad expresa del propio presidente de EE.UU. que hace 3 años firmó una Orden Ejecutiva para que se cierre la prisión en un plazo máximo de 12 meses.
María Otero, la subsecretaria de Estado, aseguró que Obama mantiene su promesa pero dice que resultó ser más complicado de lo esperado. Debe ser, entre otras cosas, porque no hay pruebas para incriminar a 90 de los prisioneros ante un tribunal.
Otro obstáculo, según el profesor Jonathan Hansen, es la “la intransigencia del Congreso” por lo que concluye que “no hay mejor manera de cerrar el campo de detención que entregar (a Cuba) ese territorio con la base naval incluida”.
Este mes se cumplieron 10 años desde que llegaron los primeros presos a la base militar, los periodistas que los contemplábamos desde las montañas cubanas no teníamos ni idea de que ante nosotros se abría el “agujero negro” de Guantánamo.
El artículo de NYT muestra una luz al final de ese túnel, resolviendo varios problemas a la vez. Para los prisioneros significaría recuperar sus derechos como seres humanos y el presidente Obama demostraría que es capaz de hacer cumplir sus órdenes.
Imagino que además serviría para unir a toda la nación cubana, más allá de la ideología que profese cada cual. ¿Qué ciudadano no apoyaría el retorno a la isla del único pedazo de tierra que hoy está en manos de una potencia extranjera?.
Sources: Cartas Desde Cuba/BBCMundo/Fernando Ravsberg/ PhotoInternet/ TheCubanHistory.com
La Base de Guantanamo/ The Cuban History/ , Editor
Comentarios del publico:
1. A las 01:59 PM del 19 Ene 2012, Angel Escribió:
Buen post, Fernando, pero a pesar de que tienes razón en muchas cosas que dices, yo preferiría vivir en la Base Naval de Guantánamo que en el resto del país en estos momentos. ¿Qué te parece? Así es de desgraciado el problema cubano.
2. A las 02:00 PM del 19 Ene 2012, Raul Escribió:
Fernando, no hay que ser ingenuos, los EE.UU. nunca entregaran Guantanamo a los Castros, ¿para que?, ¿para regalarle varios años mas de triunfalismo? Guantanamo regresará a Cuba el dia en que un nuevo gobierno cubano sepa negociar con EE.UU. como lo supo hacer el embajador cubano en Washington (Quesada) para recuperar la isla de Pinos. La diplomacia en la historia de Cuba ha sido mejor politica y dado mejores resultados que la prepotencia y el antimperialismo de opereta.
3. A las 02:02 PM del 19 Ene 2012, Cerro Escribió:
Fernando: en Guantánamo se resume lo peor del imperialismo. Militares en territorio extranjero y para peor, con presos sin judicializar. Hay una disputa entre ambos países y ni siquiera la orden del Presidente Obama dió lugar al cierre del Penal y de la Base Naval. Recuerda la intromisión de EEUU en muchos países de la región, con sus ejércitos, con la CIA o con la DEA. No debe esperar ningún gesto para entregar el territorio usurpado. América latina para los latino americanos. Saludos.
4. A las 02:05 PM del 19 Ene 2012, Bruno Escribió:
Me gustaría ver al Granma decir que le devuelvan las propiedades que el gobierno cubano le confiscó a los cubanos, al menos, o que se acaben los mítines de repudio. Por eso es que la prensa norteamericana es grande, porque tiene la libertad de criticar a su propio gobierno, el cual no está libre de culpa, como tampoco todos los demás.
5. A las 02:13 PM del 19 Ene 2012, Oreste Escribió:
Ya me imagino cómo muchos van a confundir a los exiliados cubanos con el gobierno de los EEUU. Este enfrentamiento entre ambos gobiernos es el pretexto perfecto para convertir a Cuba en un cuartel y pisotear a los ciudadanos. Volverán a confundir una de las divergencias con la totalidad de las injusticias internas.
Todos sabemos las disputas internacionales que existen en muchas fronteras del mundo, por ejemplo, entre Chile y Bolivia. Pero que los bolivianos utilizen ese problema para mantener una dictadura es lo que no tiene sentido. El gobierno cubano tiene una base en todo el resto del país y aunque sea razonable pedir que la devuelvan, me interesa más el resto, donde hay y ha habido infinidad de presos sin motivo y donde se han violado los derechos civiles de sus propios ciudadanos.
En fin, que ojalá que devuelvan la base, pero ojalá que devuelvan el país.
6. A las 02:40 PM del 19 Ene 2012, Federico Escribió:
Gracias a esa base yo escapé de Cuba.
Personalmente no puedo decir nada de ella.
7. A las 03:00 PM del 19 Ene 2012, Nestor Escribió:
Estimado Fernando:
Entre los agradecimientos y desagradecimientos que tengo a favor y en contra de los EEUU, yo estoy más agradecido que cualquier otra cosa. 99 a 1. Y gran parte del pueblo cubano asi lo ve.
Cuando los cubanos llegabamos a la ¨madre patria¨ ( España ) no teníamos derecho a nada. Entonces, ¿quién ha sido el gran benefactor de los cubanos en estos últimos 50 años si no son los EEUU?
Cuba no tiene nada en contra de España, pues eso es historia pasada. Si recurrimos a la historia, como hace The New York Times, nadie tuviera relaciones con nadie. Por ejemplo, nadie tendría relaciones con Alemania después de la II Guerra Mundial o con Italia o con Japón. O la India no tuviera relaciones con Inglaterra. Ni ningún país europeo con la España de Carlos V o de Felipe II. Tampoco hubiera católicos después de la Santa Inquisición. ¿Cómo un Papa puede ser recibido en los países de América Latina si sacamos los muertos de sus tumbas y los ponemos en los aeropuertos?
Por otra parte, nadie en el mundo nos acogió como este país. Ni siquiera los hermanos latinoamericanos que han permacecido callados frente a todas las injusticias que se cometen en Cuba.
Entonces, ¿qué quieres que te diga de la Base de Guantánamo si Miami es de los cubanos? Alcaldes cubanos, jefes de la policia, comisionados, bomberos, senadores y congresistas … Esto si que es una ocupación, no de unos miles como en Guantánamo, sino de millones.
Si el nacionalismo castrista fuera de otra manera, no personalista, de resentido hijo de español que ha maltratado sobre todo a los mismos cubanos, no al Imperio, entonces si que pudieramos estar reclamando la Base de Guantánamo. Pero tomarla de pretexto para patearnos, eso no va. Que le sigan la corriente los imbéciles.
8. A las 03:05 PM del 19 Ene 2012, Alex Soiter Escribió:
Usted es, en mi opinion, definitivamente un maestro del equilibrio. Gracias por el articulo
Sources: Cartas Desde Cuba/BBCMundo/Fernando Ravsberg/ PhotoInternet/ TheCubanHistory.com
La Base de Guantanamo/ The Cuban History/ Arnoldo Varona, Editor
LETTERS FROM CUBA
Por Fernando Ravsberg (BBCMundo) (ENGLISH)
I received an email from Europe by a friend originally from Guantanamo. In it I sent a protest against the journalists because they only mentioned his province in relation to the prison camp of the U.S. military base.
I never thought but it must be irritating to say where you were born and we all think of this black hole with prisoners orange jumpsuit, from diverse and distant places, for which there are no human rights.
In fact the U.S. military and their prisoners only occupy a small part of the territory of Guantanamo but my friend notes that have more media space than all the rest of the inhabitants of the province.
I guess she must have changed the mood to read The New York Times (NYT), which recently proposed that President Barack Obama returned to Cuba the territory of the base occupied for over 100 years.
In the article, the Harvard professor Jonathan Hansen acknowledges that “few gestures would have a more healthy in the stifling impasse Cuban-American relations, the return of the coveted piece of land.”
NYT adds that in 1901 Washington “forced Cuba to lease Guantanamo Bay as a base,” which “has served to remind the world of the long history of U.S. interventionist militarism.”
Remember the “prophetic sign” of Cuban independence leader Juan Gualberto warning that foreign bases on Cuba will bring only “conflicts that will not leave our own decisions and those who have no interest.”
Hansen tries to explain to his countrymen the feelings that resulted in U.S. Cuba policy during the independence of Cuba and does it compare with their own history of independence.
“Imagine that at the end of the American Revolution the French had decided to stay here, that would have prevented Washington and his army to attend the truce in Yorktown and in the Continental Congress refused a seat at the Americans.”
It is during the military occupation that Cuba “give” the naval base, “consents” to disarm the army mambí and “agree” to include in the Constitution an amendment that entitles the U.S. to invade the island whenever they want.
But not all speak ill of the military base of Guantanamo. A Miami newspaper published an article which describes it as a friendly village with radio station, Mc Donald and provide for shops with caricatures of Fidel Castro.
Ensures that live there make fun of former President for calling for since 1960 to return the territory of the base to Cuba. But the truth is that the problem is much older, in 1901, when they entered Guantanamo, Fidel Castro was born.
They explain that “a highly strategic location. So the Navy maintains it as a village with port, jail and runway, about 6,000 passengers between troops, U.S. contractors, spouses and children.”
Interestingly they forgot to mention that hold 170 prisoners there against the express wishes of the U.S. president himself 3 years ago signed an executive order to close the prison within a maximum period of 12 months.
María Otero, Under Secretary of State, said that Obama keeps his promise but says it was more complicated than expected. It must be, among other things, because there is no evidence to frame 90 of the prisoners in court.
Another obstacle, according to Professor Jonathan Hansen, is the “intransigence of Congress” so he concludes that “there is no better way to close the detention camp to surrender (to Cuba) that territory included the Naval Station.”
This month marked 10 years since the first prisoners arrived at the military base, the journalists who watched from the Cuban mountains we had no idea that before we opened the “black hole” of Guantanamo.
The NYT article shows a light at the end of that tunnel, solving several problems at once. For prisoners would recover their rights as human beings and show that President Obama is able to enforce his orders.
I imagine that also serve to unite the entire Cuban nation, beyond the ideology that professes each. What citizen would not support a return to the island’s only piece of land that is now in the hands of a foreign power?.
Sources: Letters from Cuba / BBCMundo / Fernando Ravsberg / PhotoInternet / TheCubanHistory.com
Guantanamo Base / The Cuban History / Arnoldo Varona, Editor