Porfirio Hernández Hernández Valentin better known as “The Pilot” was born in the city of Jaruco, Cuba on December 16, 1893, he was a faithful follower of Baseball Championships in Cuba.
Few people knew him by that name, but by the Pilot nickname, although it has nothing to do with their fanaticism to the ball and Club Almendares was a fan of no limits. This nickname was acquired Pilot due to a relative, who was pilot of Cubana de Aviacion, and talking a lot in their evening ball, so he was nicknamed by Pilot.
Charismatic, very Cuban, a calm personality, friendly, social, helpful, and accomodating.
He wore a straw hat in the style of the 20’s, who did not take off ever, which to draw attention to all, passing daily through the streets, where he bowed known allegorical baseball, always with his comments about what happened with both ball games in the town, and beyond.
Furious Baseball fan
And yet, faithful listener of the radio transmissions beisboleras, for which he carried in his personal notebook everything that happened in the games, each player plays with statistical tables, record hits, outs, Strikes, etc., with this book to stay in the corner was the Pharmacy of Dr Espinel, current library today, also called Four Corners, where they met many fans who knew him, making it a great chorus and some discussion forming each defending their favorite team.
The singing voice was always the pilot, his friends who knew of his fanaticism, tried to go against him and got excited, and so angry that everyone was having a great, all this fanaticism, predisposing temperament and was the cause of anecdotes so sympathetic Pilot made a colorful character, being known to the country’s capital.
Where Pilot Team Almendares won the game, went out and threw a flying weight-named for its fame, the flyers were used only in the celebration of Patron, to leave and enter the Holy Catholic Church in the choice of the Star of Carnival or when receiving the visit of important politicians, but this fan bought it, (often making adventures with his family economy) and threw it to reaffirm their fanaticism which lit with a snuff, (the smoke that it always) set fire to the wick and shot out to a great height, and burst into a loud noise, hearing all over town.
Valentin Hernandez ‘The Pilot’ died on September 9, 1975.
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Once the Almendares team was playing in the grounds of the resort, and was winning in the last inning with two outs to win and the opposing team’s batter with two strikes, then pilot is trusted and so desperate to see winning team that went to the street and threw the flying weight, and just exactly when the opposing team with a man on base gave a home-run, so that his team had to lose the game. At that time met at the door of his house all the friends and many supporters of the team that had won the game, forming what we call today the hot corner, where nothing came Pilot happy.
The pilot flying became so famous to throw when he won the team that defended so vehemently that when I had to buy the damn weight, his friends met him for not wanting, and could realize his desire.
Sources: Cubarte/PilotoCuba/InternetPhotos/TheCubanHistory.com
Cuban Characters:ElPiloto/The Cuban History/ Arnoldo Varona, Editor
PERSONAJES DE CUBA: “EL PILOTO”
Porfirio Valentín Hernández Hernández más conocido como “El Piloto” nació en la Ciudad Condal de Jaruco, Cuba el 16 de diciembre de 1893, fiel seguidor de los Campeonatos de Béisbol en Cuba.
Pocas personas lo conocieron por este nombre, sino por el sobrenombre de Piloto, que aunque no tiene nada que ver con su fanatismo a la pelota y al Club Almendares del que era un fanático sin límites. Dicho sobrenombre de Piloto lo adquirió debido a un familiar, el cual era Piloto de Cubana de Aviación, y del que hablaba mucho en sus tertulias de pelota, por lo que lo apodaron con Piloto.
Personaje carismático, muy cubano, de una personalidad tranquila, agradable, social, servicial, y complaciente.
Usaba un sombrero de pajilla, al estilo de los años 20, el que no se quitaba jamás, lo que hacia llamar la atención a todos, a su paso diario por las calles, donde conocidos le hacían reverencias alegóricas con el béisbol, siempre con sus comentarios acerca de lo acontecido con juegos de pelota tanto en la localidad, como fuera de ella.
Aficionado al Béisbol
Y más aún, fiel oyente de las transmisiones beisboleras por la radio, por las que llevaba en su libreta personal todo lo acontecido en los juegos, jugadas de cada pelotero con tablas estadísticas, Récord de batazos, Outs, Strikes, etc; con esa libreta hacia su estancia en la esquina donde estaba la Farmacia del Dr Espinel, hoy actual Librería, también en la llamada Cuatro esquinas, donde se reunían muchos fanáticos que lo conocían, haciéndole un gran coro y formándose algunas discusiones defendiendo cada uno a su equipo preferido.
La voz cantante siempre la llevaba Piloto, sus amigos que conocían de su fanatismo, trataban de llevarle la contraria para verlo como se acaloraba, y se enfadaba tanto que todos se divertían muchísimo, todo ese fanatismo, predisponía su temperamento y fue el causante de anécdotas tan simpáticas que hicieron de Piloto un personaje pintoresco, siendo conocido hasta en la Capital del País.
Piloto siempre que el Equipo del Almendares ganaba el juego, salía a la calle y lanzaba un volador de a peso llamado así por su fama, los voladores se utilizaban solo en las celebraciones de Fiestas Patronales, al salir y entrar el Santo a la Iglesia Católica, en la elección de la Estrella de Carnaval o cuando se recibía la visita de políticos importantes, pero este aficionado lo compraba, (muchas veces haciendo peripecias con su economía familiar,) y lo lanzaba para reafirmar su fanatismo el que encendia con un tabaco, (del que el mismo fumaba siempre) se prendía fuego a la mecha y salía disparado a una gran altura, y al estallar hacia un gran estruendo, oyéndose en todo el pueblo.
Valentin Hernández ‘Ël Piloto’ falleció el 9 de septiembre del 1975.
Una anécdota
En una ocasión que el equipo del Almendares estaba jugando en los terrenos de la localidad, y estaba ganando, en el último Ining con dos Outs a la victoria y el bateador del equipo contrario con dos Strikes, pues Piloto se confió y desesperó tanto al ver ganando a su equipo que salió para la calle y lanzó el volador de a peso, justo y en el momento exacto en que el equipo contrario con un hombre en base dio un Home- run, por lo que su equipo hubo de perder el juego. En ese momento se reunieron en la puerta de su casa todos los amigos y muchos defensores del equipo que había ganado el juego, formando lo que hoy dia llamamos la Esquina Caliente, en donde Piloto no salió nada contento.
Los voladores de Piloto se hicieron tan famosos al lanzarlos cuando ganaba el equipo que defendía con tanta vehemencia que cuando no tenía el dichoso peso para comprarlo, sus amigos se lo reunían para que no le faltase y pudiera realizar su deseo.
Sources: Cubarte/PilotoCuba/InternetPhotos/TheCubanHistory.com
Cuban Characters:ElPiloto/The Cuban History/ Arnoldo Varona, Editor