– LITERATURE: CORTAZAR’S new biographical album. Cuba, “Road to Damascus”. (Photos) * * LITERATURA: CORTAZAR, nuevo album biográfico. Cuba “Camino de Damasco”. (Fotos)

LITERATURA: CORTAZAR, NUEVO ALBUM BIOGRÁFICO. CUBA “CAMINO DE DAMASCO”.

Cuba fue su ‘camino de Damasco’. Su ex esposa y albacea juró no volver más a La Habana. Un álbum recorre toda la biografía del escritor.

Cortazarlope

.. Estamos en pleno centenario del natalicio del autor de Rayuela, un pretexto ideal para nuevas publicaciones y ferias del libro que le rinden (y rendirán) enjundiosos homenajes. Aparece entonces el libro que aquí presento: Cortázar de la A a la Z. Un álbum biográfico, cuya edición es obra de Aurora Bernárdez, su primera esposa, y de Carlos Alvarez Garriga, filólogo y estudioso de la obra cortazariana.

Lo que en apariencias pudiera parecernos, tras simple hojeada, un libro de contenido superficial, tiene, como veremos, sobrado interés. Lo primero que me salta a la vista es que puede ser leído como Rayuela, pues tratándose de un diccionario, el orden alfabético de las entradas no implica cronología alguna.

Quien, por otra parte, haya soñado con fisgonear en la memorabilia de Cortázar, o desee repasar los grandes hitos de su vida y obra, tendrá en este volumen de 313 páginas mucha tela por donde cortar. Habilidosa y oportunamente presentado siguiendo el orden alfabético de los acontecimientos, personajes, momentos o situaciones de su vida, el álbum rescata fotografías, cartas, dedicatorias, portadas, anotaciones, galeradas, tarjetas, objetos y documentos personales, entre muchas otras curiosidades relacionadas con el inventor de los célebres cronopios.

Sabido es que Cortázar hurgó en su pasado para reinventar una Argentina a su medida mediante una obra que escribió, desde 1951 y hasta su muerte, esencialmente en París. Hay tanto de la capital francesa, de sus claves culturales, de Francia en general, que cuesta trabajo apartar ese cliché que pretende que no hay Buenos Aires sin París, ni argentino que no viva pensando en el Sena.

pict

CUBA, CAMINO DE DAMASCO.

Pero a partir de 1961 aparece lo que luego, en una entrevista dada a la escritora Rosa Montero, llamará su “camino de Damasco”. Se refiere a Cuba, país al que llega por primera vez en esa fecha. Allí conoce al “inmenso cronopio”, a José Lezama Lima, a quien quiere y admira al punto de considerar su novela Paradiso como “el descubrimiento de una poesía capaz de abarcar no solo el esplendor del verbo sino la totalidad de la vida desde la más ínfima brizna hasta la inmensidad”. Una larga carta inédita de Lezama revela su intenso intercambio de ideas.

El libro reproduce un caballito de metal y una tortuguita de jade, regalos de Lezama que Cortázar conservaba en París. Quienes saben de los denuedos del autor de Paradiso para, contra vientos y mareas, continuar su obra en medio de la hostilidad de los funcionarios de la cultura oficial, reconocerán en esas figuritas el gesto triste de un hombre de infinita cultura debatiéndose en el kafkiano mundo de las consignas revolucionarias. No es difícil imaginar que al regalar esas tiernas figuritas les puso alas imaginarias para que volaran a donde a él no lo dejaban ir. No debe ser entonces fortuita —como no es fortuito nada en Lezama— la elección de dichos animales.

Cuba se cuela irremediablemente, más que en la obra, en la existencia misma cortazariana. A veces aparece de forma inesperada, como cuenta que le ha sucedido con ese lienzo de una mujer pintada que le regala en 1963 el pintor René Portocarrero. La fémina se convierte en la Delia de Circe y viceversa. A esas alturas, Cortázar cree en una simbiosis total y no sabe qué mujer tomó las características de la otra.

Hay fotos de Cortázar fumando un último habano antes de abandonar la Isla. Se le ve acompañado en otra por el escritor Manuel Pereira durante el jurado al premio Casa de las Américas en 1980. En una carta a Roberto Fernández Retamar comparte emociones por la salida de Rayuela. Una tarjeta postal enviada desde un hotel de la Isla y fechada en enero de 1983 (un año antes de su muerte) cuenta a dos amigos que ha trabajado mucho en Cuba, país “que está en un gran momento”, antes de seguir rumbo a Managua.

No es este un libro que deje las vergüenzas ni las intimidades de Cortázar al aire. Se adivina la prudencia en la selección de materiales porque no hay nada que nos haga cambiar de opinión sobre todo lo que sabemos del prolífico cuentista.

Julio-Cortazar-4523

Se dice, sin embargo, que Cuba fue el detonante para que todo empezase a ir mal entre Cortázar y Aurora. La sociedad que al escritor le pareció admirable produjo el efecto contrario en su primera esposa. De aquel primer viaje Vargas Llosa se ha declarado recientemente culpable, lo hizo al rememorar en un encuentro con Bernárdez en El Escorial por los 50 años de Rayuela que fue él quien animó a Cortázar a darse una vuelta por La Habana. En ese entonces no tenía el argentino una línea ideológica definida, a excepción de un antiperonismo por razones más bien estéticas. El viaje a Cuba sentó entonces las bases para que de apático se convirtiera en ferviente defensor del orden establecido por la revolución cubana.

Tras aquel primer viaje Aurora se prometió no volver a poner nunca más sus pies en la Isla. Cortázar, en cambio, no faltó nunca a una cita en la Casa de las Américas. Dos años antes del divorcio, Cortázar conoce en La Habana a la que será su segunda esposa, la lituana Ugné Karvelis. Y si bien en su obra no reflejó nunca sus posiciones políticas, su presencia en los círculos de la cultura cubana oficial y sus entusiastas cartas a amigos (como a los Jonquières, publicadas también por Alfaguara en 2010) denotan lo muy a gusto que se encontraba entre los revolucionarios.

Editora, albacea y heredera testamentaria de toda la obra de quien fue su esposo, Bernárdez va sacando a cuentagotas el material inédito que conserva. Publicó anteriormente (también en Alfaguara) Papeles inesperados, con la misma intención de recuperar retazos de una vida.

Algo ha quedado más o menos claro: La Habana no es para ella un sitio de felices recuerdos. A pesar de ello, no traiciona la memoria del autor. Cortázar de la A a la Z … exhibe en su portada a Cortázar en la capital cubana en 1967. Allí aparece captado por el lente del originalísimo fotógrafo de escritores “Chinolope”. Está sentado en uno de los tramos del mítico malecón habanero, y con su metro noventitrés de estatura lo empequeñece haciendo que parezca un murito de poca monta. Un muchacho pasa correteando justo a sus espaldas. Y es como si todos los sueños de Cortázar, los de la niñez y los de su adolescencia, hubieran terminado en La Habana, como si hubiesen germinado o muerto definitivamente en esa ciudad de la discordia.

Cortázar y el triángulo Buenos Aires-La Habana-París. Articulo Completo

DDC/William Navarrete/Excerpts/ InternetPhotos/www.thecubanhistory.com
LITERATURE: CORTAZAR’S new biographical album. Cuba, “Road to Damascus”.
Cortázar de la A a la Z. Un álbum biográfico
(Edición de Aurora Bernárdez y Carles Álvarez Garriga, Alfaguara, Madrid, 2013).
The CUban History, Hollywood.
Arnoldo Varona, Editor

La Habana, Cuba. Cuba en Fotos.
10457838_10152448562111083_8767697086315700174_n

LITERATURE: CORTAZAR’S NEW BIOGRAPHICAL ALBUM. CUBA, “ROAD TO DAMASCUS”.

Cuba was his ‘road to Damascus’. His ex-wife and executor vowed never to return to Havana. An album runs through the biography of the writer.

Cortazarlope

We are in the centenary of the birth of the author of Hopscotch, ideal for new publications and book fairs to render (and yield) enjundiosos tributes pretext. Cortázar from A to Z. A biographical album, whose edition is the work of play along, his first wife, and Carlos Alvarez Garriga, philologist and scholar of Cortazarian work: the book presented here is then displayed.

What in appearances may seem, after single flip, a book of superficial content, has, as we shall see, leftover interest. The first thing that jumps out at me is that it can be read as hopscotch, as in the case of a dictionary, the alphabetical order of the entries does not establish chronology.

Who, moreover, has dreamed snoop memorabilia Cortázar, or want to review the milestones of his life and work, will this volume of 313 pages where a lot of fabric cut. Skillful and timely filed in alphabetical order of events, characters, moments or situations in your life, the album redeems photographs, letters, autographs, covers, notes, galleys, cards, personal objects and documents, among other curiosities related to the inventor of the famous cronopios.

It is known that Cortázar reached into his past to reinvent Argentina Tailor by a book he wrote from 1951 until his death, mainly in Paris. There is so much of the French capital, its cultural keys, France in general, hard to tear that cliché that claims that there is no Paris Buenos Aires, Argentina or not live thinking of the Seine.

CUBA, DAMASCUS ROAD.

pict

But from 1961 which then appears in a given writer Rosa Montero interview, call his “road to Damascus”. Refers to Cuba, a country that first arrive on that date. He meets the “immense cronopio” José Lezama Lima, who love and admire the point of considering his novel Paradiso as “the discovery of a poetry able to cover not only the splendor of the verb but the whole of life from the tiny drill to immensity. ” A long Lezama unpublished letter reveals his intense exchange of ideas.

The book reproduces a metal horse and jade turtle gifts Lezama Cortazar kept in Paris. Those who know the author’s denuedos Paradiso, against winds and tides, continue his work amid the hostility of officials of the official culture, recognize in these figures the sad gesture of a man of infinite culture discussion in the Kafkaesque world of revolutionary slogans. It is hard to imagine that he gave those tender figurines put them imaginary wings to fly to where he did not let go. It should not be so fortuitous as no accident-nothing-Lezama choosing these animals.

Cuba inevitably slips, rather than the work, the existence Cortazarian. Sometimes appears unexpectedly, as has happened to you that a painted canvas of woman who gives him the painter René Portocarrero 1963. The female becomes Circe Delia and vice versa. By now, Cortázar believes in a total symbiosis and not sure what woman took the characteristics of the other.

There are pictures of Cortázar smoking a last cigar before leaving the island He is accompanied by another writer Manuel Pereira during jury Casa de las Americas prize in 1980. In a letter to Roberto Fernández Retamar share emotions output Hopscotch. A postcard sent from a hotel on the island and dated January 1983 (a year before his death) has two friends who has worked extensively in Cuba, a country “that is in a great moment,” before continuing on to Managua.

This is not a book to leave the shame and the intimacies of Cortázar air. Guess prudence in the selection of materials because there is nothing to make us change your mind about all we know of the prolific storyteller.

Julio-Cortazar-4523

However, it is said that Cuba was the catalyst for everything to go wrong between empezase Cortázar and Aurora. The society that the writer seemed admirable produced the opposite effect on his first wife. From that first trip Vargas Llosa was recently convicted, who did the recall in a meeting with Bernárdez in El Escorial for 50 years hopscotch it was he who encouraged Cortázar to shop around Havana. At that time Argentina had no definite ideological line, except for a rather antiPeronism for aesthetic reasons. The trip to Cuba then laid the groundwork for apathetic became fervent defender of the established order by the Cuban revolution.

After that first trip Aurora vowed never to put more feet on the island Cortázar, however, he never missed an appointment at the Casa de las Americas. Two years before the divorce, Cortázar known in Havana would be his second wife, the Lithuanian Ugné Karvelis. And while his work never reflected their political positions, their presence in the official circles of Cuban culture and enthusiastic letters to friends (like the Jonquières, also published in 2010 by Abundant) denote the very comfortable which was among revolutionaries.

Editor, testamentary executor and heir to all the work of her husband who was, takes out a dropper Bernárdez unreleased material preserved. He previously published (also in Abundant) Unexpected roles, with the same intention to recover pieces of a life.

Something has been more or less clear: Havana is not for her a place of happy memories. However, the memory does not betray the author. Cortázar from A to Z … displays on its cover Cortazar in Havana in 1967. Appears there captured by the lens of photographer most original writers “Chinolope”. Sitting on one of the sections of the mythical Malecón, and his noventitrés meter tall dwarfs doing what look like a petty little wall. A boy goes scampering right behind her. And it’s as if all the dreams of Cortazar’s childhood and his adolescence, had ended in Havana, as if they had germinated or definitely dead in that city of contention.

Cortázar y el triángulo Buenos Aires-La Habana-París. Articulo Completo

DDC / William Navarrete / Excerpts / InternetPhotos / www.thecubanhistory.com
LITERATURE: Cortazar biographical’S new album. Cuba, “Road to Damascus”.
Cortázar from A to Z. A biographical album
(Editing and play along Alvarez Carles Garriga, Abundant, Madrid, 2013).
The Cuban History, Hollywood.
Arnoldo Varona, Editor

TheCubanHistory.com Comments

comments