ÚLTIMOS MINUTOS DEL “CHE” GUEVARA EN BOLIVIA.
Se han cumplido en estos días de Octubre, 47 años de la muerte del “Che” Guevara en Bolivia. Recordando la fecha y los hechos que marcaron el inicio a muchas especulaciones e historias, ahora informamos, en las propias palabras de un testigo de los últimos minutos con vida del comandante argentino.
Eran horas después de la captura del “Che” Guevara en La Quebrada del Yuro y su traslado a la escuela de la Higuera donde sería asesinado, Félix Rodríguez Mendigutía, en aquel entonces agente del CIA enviado para el asesoramiento a los bolivianos y testigo presencial de los hechos hace el relato:
LA CIA QUERÍA AL “CHE” GUEVARA VIVO.
.. “la CIA lo quería vivo a toda costa. De eso no te quepa la menor duda. Te voy a explicar. Yo creo que la decisión de la parte boliviana de eliminar al Che viene por el problema tan crítico que ellos tenían con el juicio de Regis Debray y Ciro Bustos, el intelectual francés y el periodista argentino capturados luego de visitar a los guerrilleros. Imagínate, ellos debieron pensar que si tenían manifestaciones de estudiantes y presiones diplomáticas por un juicio contra dos personas prácticamente desconocidas, qué iba a pasar con un juicio contra el Che Guevara… Definitivamente, yo creo que la decisión del gobierno boliviano obedeció a esa razón y no a otra”.
Así recuerda Félix Ismael Rodríguez Mendigutía, cómo pensó evitar la muerte del guerrillero argentino, al retardar la orden de ejecución cortando el cable del teléfono, en aquel mediodía del 9 de octubre de 1967, cuando recibió una orden en clave del alto mando del Ejército boliviano: 500-600. “Era un código muy sencillo, 500 significaba Che Guevara, 600 muerto y 700 mantenerlo vivo”.
“Hice todo lo posible por salvarle la vida al Che Guevara. Y eso en La Habana los saben, el ministro Arguedas se lo dijo cuando les entregó las manos del Che y las fotocopias de su diario.
La CIA queria mantenerlo vivo. Es más, nos habían dicho que a los bolivianos no les gustaba mantener prisioneros, que si el Che era capturado, hiciéramos todo lo posible para mantenerlo con vida, que ellos iban a mantener helicópteros y aviones listos para llevarlo a Panamá para interrogarlo en el Comando Sur. Y honestamente, yo no creía que eso funcionaría, no creía que el Che Guevara fuera a colaborar.
… (pero) en aquellos momentos, recordé cuando Batista soltó a Fidel Castro después que asaltaron el cuartel Moncada; y lo que pasó y está pasando en Cuba, y entonces me dije: este hombre vino aquí, invadió este país, hay una cantidad de muertos por culpa suya, y yo no estoy aquí para comandar, yo estoy aquí para asesorar. Este es un asunto del gobierno boliviano, de su dirección, y tú te metes a hacer eso, y a lo mejor tienes éxito, y después a este hombre lo sueltan y hay muertes en veinte países más, y tú vas a ser el responsable; mira, es decisión boliviana, deja que la Historia siga su curso”
CULPABLES PRINCIPALES DE SU MUERTE.
“En ese momento yo no conocía las divergencias existentes entre el Che Guevara y los comunistas soviéticos. A los gobernantes de la URSS no les interesaba que el Che triunfara en ningún lugar. De hecho no lo ayudaron en África. Las armas que empleó allá las proporcionó la China comunista, no los soviéticos. Y Cuba dependía 100% de la URSS, eso quizás te da una idea de por qué él se sintió traicionado por Fidel Castro, y aunque no lo admitió de forma verbal, sí pude percibirlo en su rostro cuando hablamos por última vez.
Por los hechos. Ellos estaban allí, en Bolivia, sin comunicación. Recibieron un radio roto y por si no fuera suficiente, con el pretexto de que se le había vencido la visa, le retiraron al oficial de enlace, alguien con ciudadanía boliviana que los canalizó a su llegada, pero que luego lo retiraron de esa operación dejando al Che y a sus guerrilleros a la buena de Dios”.
LOS ÚLTIMOS MINUTOS DEL CHE GUEVARA.
“Eran alrededor de las doce del día, hora de Bolivia.
Entré en la habitación, él estaba sentado, y parándomele enfrente le digo: “Comandante, lo siento, yo he tratado, pero son órdenes superiores.
…quedó blanco, blanco como un papel. Luego se compuso y me dijo: “Es mejor así, yo nunca debí caer preso vivo”. Entonces le pregunté: ¿Quiere algo para su familia si puedo hacerle llegar el mensaje? Y en una forma sarcástica me dice: “Bueno, si puede, dígale a Fidel (en su habitual forma sarcástica) que pronto verá una revolución triunfante en América Latina. Y si puedes, dile a mi señora que se case otra vez y que trate de ser feliz”. Esas fueron sus últimas palabras. Vino, me dio la mano, me dio un abrazo y al separarnos, se paró en atención, pensando que yo era el que le iba a tirar.
Me encontraba hablando con el Che, cuando en la habitación de al lado sonó un disparo y sentimos un cuerpo caer. Habían matado a Aniceto. El Che movió la cabeza a ambos lados; yo no dije nada, él tampoco, siguió hablando como si no hubiera pasado nada. Pero llega un momento en que salgo, estoy fuera de la habitación cuando llega esa muchacha (la maestra de la escuela de la Higuera) con un radio de mano y me dice: “Capitán, ¿cuándo lo van a matar?” Entonces digo: Señora, ¿por qué usted dice eso? Contestándome ella: “Porque nosotros acabamos de verlo fotografiándose con él, pero la radio está dando la noticia que murió de heridas en combate”. Entonces supe que ya no había nada más que hacer.
Salí de allí, todos los esfuerzos realizados con el mando del Ejército boliviano para cumplir con las indicaciones de mi gobierno no resultaron. Y a la una y diez o la una y veinte de la tarde sonó una ráfaga corta, la de la carabina M-2 del teniente Pérez con la que el sargento Terán lo ejecutó.
… después que sonó la ráfaga de M-2 que concluyó con la vida del Che, el capitán Gary Prado, el capitán Celso Torrelli, que luego llegó a presidente de Bolivia y yo, entramos a la habitación; el cadáver del Che estaba con la boca y los ojos abiertos, hacia el techo, como el piso estaba muy húmedo, la cara se le había enlodado. Volviéndose hacía mí, Gary Prado dijo: “Mi capitán, hemos acabado con las guerrillas en América Latina”, a lo que yo le contesté: “Si no hemos acabado con ellas, por lo menos las hemos demorado por largo tiempo”. Después ellos se retiraron en el helicóptero, y yo les pedí a los soldados un balde con agua, me agaché, le lavé la cara, quitándole todo el fango que tenía en ella, y con mi pañuelo, que después perdí en el vuelo a Vallegrande, traté de cerrarle la quijada”.
Asi terminó la vida de Ernesto “El Che” Guevara, para unos un héroe, para muchos fue la quiebra final del Che, una fría máquina de matar.
Nota: Parte de la entrevista del periodista habanero Alberto Méndez Castelló a Félix Rodríguez Mendigutía sobre los últimos momentos del Che Guevara en Bolivia.
Cubanet/Excerpts/InternetPhotos/YouTube/www.thecubanhistory.com
The Cuban History, Hollywood.
Arnoldo Varona, Editor.
CUBA PHOTOS.
“CHE” GUEVARA’S LAST MINUTES.
It has been the 47 anniversary of the death of “Che” Guevara in Bolivia. Recalling the date and the events that marked the beginning of much speculation and stories, now reported, in the words of a witness of the last minutes alive Argentine commander.
It was hours after the capture of the “Che” Guevara in La Quebrada del Yuro and transfer to School Higuera where he would be killed, Félix Rodríguez Mendigutía, then a CIA agent sent for counseling Bolivians and eyewitness events makes the story:
THE CIA TO WANTED “CHE” GUEVARA LIVE.
.. “The CIA wanted him alive at all costs. That will not be the slightest doubt. I’ll explain. I believe that the decision to remove the Bolivian part of Che is the critical issue they had with the Regis Debray trial and Ciro Bustos, the French intellectual and Argentine journalist captured after visiting the guerrillas. imagine, they must have thought that if they had student demonstrations and diplomatic pressure from a lawsuit against two virtually unknown, what would happen a trial of Che Guevara … I definitely think that the decision of the Bolivian government was due to this reason and no other. ”
So remember Félix Ismael Rodríguez Mendigutía how he thought to avoid the death of Argentine guerrilla, by delaying the execution order cutting the phone cord, at the noon of October 9, 1967, when he received an order code of the high command of the Bolivian Army : 500-600. “It was a very simple code 500 meant Che Guevara, 600 dead and 700 keep it alive.”
“I did everything possible to save the life of Che Guevara. And that in Havana knows, the Minister Arguedas told him when she handed the hands of Che and photocopies of her diary.
The CIA wanted to keep him alive. Moreover, we were told that the Bolivians did not like keeping prisoners, if Che was captured, we do everything possible to keep him alive, they would keep helicopters and aircraft ready to take to Panama for interrogation in the Command South. And honestly, I did not think that would work, did not believe that Che Guevara was to collaborate.
… (But) at the time, I remember when Batista Fidel Castro released after he attacked the Moncada barracks; and what happened and is happening in Cuba, and then I said, this man came here, invaded this country, there are a number of dead because of him, and I’m not here to command, I am here to advise. This is a matter of the Bolivian government, their address, and you mess that you do, and maybe you succeed, then you release this man and no deaths in twenty countries, and you’re going to be responsible; look, it’s Bolivian decision, let history take its course ”
MAIN GUILTY OF HIS DEATH.
“At that time I did not know the differences between Che Guevara and the Soviet Communists. Rulers of the USSR were not interested in Che succeed anywhere. Fact not helped Africa. Weapons that used beyond the gave communist China, not the Soviets. and Cuba depended 100% of the USSR, that might give you an idea of why he felt betrayed by Fidel Castro, and although he admitted verbally, yes I could see it in his face when we last spoke.
By the facts. They were there, in Bolivia, no communication. They received a broken radio and if that was not enough, on the pretext that they had won a visa, they retreated to the liaison officer, someone with Bolivian citizenship that channeled his arrival, but then withdrew from the operation leaving Che and his guerrillas to the good of God. ”
THE LAST MINUTES OF CHE GUEVARA.
“It was about noon, when Bolivia.
I entered the room, he was sitting, and opposite parándomele say: “Commander, I’m sorry, I tried, but higher orders.
It was … white, white as a sheet. Then he wrote me and said, “It’s better this way, I should never fall prey alive.” Then I asked: Do you want something for your family if I can get him the message? And in a sarcastic way says, “Well, if you can, tell Fidel (in his usual sarcastic way) that you will soon see a triumphant revolution in Latin America. And if you can, tell my lady to marry again and try to be happy. “Those were his last words. Wine, shook my hand, gave me a hug and parted, stood at attention, thinking I was going to throw him.
I was talking with Che, when in the next room heard a shot and felt a body fall. They had killed Aniceto. Che nodded to both sides; I said nothing, he did not, went on as if nothing had happened. But there comes a time when I go out, I’m out of the room when that girl (teacher School Higuera) with a handheld radio comes in and says, “Captain, when are they going to kill?” Then I say: Lady, why do you say that? Her answering me, “For we have just seen photographed with him, but the radio is giving the news that he died of wounds in combat.” Then I knew I had nothing else to do.
I left there, all efforts to control the Bolivian Army to comply with the instructions of my government did not turn. And the one ten or twenty past one p.m. rang a short burst, the air rifle M-2 Lieutenant Perez with Sergeant Terán executed it.
… after the flurry of M-2 that ended the life of Che, Captain Gary Prado, Captain Celso Torelli, who later became president of Bolivia and I walked into the room; Che’s body was with the mouth open and eyes toward the ceiling, and the floor was very wet, her face was muddy. Turning towards me, Gary Prado said, “Captain, we’re done with the guerrillas in Latin America”, to which I replied, “If we have not done with them, at least we’ve delayed for a long time.” After they retired in the helicopter, and I asked the soldiers a bucket of water, I ducked, I washed my face, removing all the mud that was in it, and my handkerchief, after lost on the flight to Vallegrande I tried to close the jaw. ”
So ended the life of Ernesto “Che” Guevara, a hero to some, for many it was the final bankruptcy of Che, a cold killing machine.
Note: Part of the interview the journalist Alberto Mendez Castello habanero Felix Rodriguez Mendigutía about the last moments of Che Guevara in Bolivia.
Cubanet / Excerpts / InternetPhotos / YouTube / www.thecubanhistory.com
The Cuban History, Hollywood.
Arnoldo Varona, Editor.