OPINION: 57 YEARS OF GOVERNMENT IN CUBA. .
If measured by the ability to adhere to power, the Castro government has succeeded without a doubt. Raul Castro was defense minister at age 28; already it has 85.
The Castros have met 57 eneros in power. At this point, the general curiosity simply make three disturbing questions: Why have lasted so long? Is it a failure, as they say their opponents, or a success, as claimed by supporters? What will happen after this long government, the longest in the history of America? The Castro government has been so enduring because it is a dictatorship that does not seek the consent of society and is dedicated to obey. On the contrary, their efforts are constantly dedicated to direct and oversee.
The secret of this permanence is to convert the people into sheep and conveniently estabularlo. To those ends it has a formidable apparatus of counterintelligence encryption in about 60 thousand people and proven repressive script. 0.5% of the population, according to the infallible formula learned German Stasi, mother and teacher of Cubans by the KGB services.
.. Have you succeeded or failed Castroism? If measured by the ability to adhere to power, he has succeeded beyond doubt. Raul Castro was defense minister at age 28; already he has 85, and has never ceased to live lavishly by the royal family. To him and his henchmen group it has been successful.
If measured by the influence achieved by the regime, the conclusion is the same. Venezuela has become a generous settlement and political operators of the Cuban DGI oriented, control or influence a dozen miserable Latin American countries to end Colombia’s peace is negotiated in Havana.
But if you consider is the general prosperity of the country and the degree of genuine happiness of the whole population, it has been a resounding failure. Throughout three generations of Cubans have suffered thousands of executions have been imprisoned tens of thousands of political prisoners were exiled million people, and the government has erected creation mode most unproductive wealth of history, while demolished meticulously material structure he inherited. It is “the art of making ruins” at its finest.
In 57 years of absolute control of power, Castro has aggravated even martyrdom key elements of everyday life: food and access to drinking water, housing, transport, communications, electricity, clothing and Footwear. That gloomy outlook beyond, as always, thousands of Cubans these days stranded in Costa Rica, compassionately cared for by the government and the people of that country exemplary.
These harmful results are not actually the product of evil, but of ignorance, greed for power and arrogance emanating from revolutionary Marxist certainties. They were willing to kill and harm as long stay in power and force Cubans to live according to the utopia that they had stayed in their heads feverish. So they have devastated the country.
What will happen in the future? Nothing substantial. While not disappear or retire from public life the Castro and his clique, and while that system, today transformed into a military state capitalism, remain standing, the country will remain condemned to mass migration of desperate Cubans and more radical unproductive.
The basic problem lies in perceptions and confidence that emanates from them. Americans do not care if you remove the embargo or substantially increase the number of tourists. No matter if President Obama visit Cuba, as the last three popes, and made a speech in favor of freedom.
Cubans, as a rule, do not believe in the system. They do not believe their compatriots. They do not believe in the destiny of the country. Do not believe those who run, much less in the ability of that sleepy and grim bureaucracy continues imperturbably practicing central planning. All this begins to change after buried Castroism. Never before.
Opinión/Carlos Alberto Montaner / Internet Photos / Excerpts/TheCubanHistory.com
The Cuban History, Hollywood.
Arnoldo Varona, Editor.
OPINIÓN: 57 AÑOS DE GOBIERNO EN CUBA.
Si se mide por la capacidad de adherirse al poder, el gobierno de los Castro ha triunfado sin la menor duda. Raúl Castro era ministro de Defensa a los 28 años; ya tiene 85.
Los Castro han cumplido 57 eneros en el poder. A estas alturas, la curiosidad general se limita a formular tres preguntas inquietantes: ¿Por qué han durado tanto? ¿Es un fracaso, como dicen sus adversarios, o un éxito, como aseguran los simpatizantes? ¿Qué sucederá después de este larguísimo gobierno, el más prolongado de la historia de América? El gobierno de los Castro ha sido tan duradero porque es una dictadura que no busca el consentimiento de la sociedad ni se dedica a obedecerla. Por el contrario, sus esfuerzos están permanentemente consagrados a dirigirla y controlarla.
El secreto de esa permanencia es convertir al pueblo en rebaño y estabularlo convenientemente. Para esos fines dispone de un formidable aparato de contrainteligencia cifrado en unas 60 mil personas y un probado guión represivo. El 0.5% de la población, de acuerdo con la infalible fórmula aprendida de la Stasi alemana, madre y maestra de los servicios cubanos junto al KGB.
.. ¿Ha triunfado o fracasado el castrismo? Si se mide por la capacidad de adherirse al poder, ha triunfado sin la menor duda. Raúl Castro era ministro de Defensa a los 28 años; ya tiene 85, y nunca ha dejado de vivir espléndidamente junto a la familia real. Para él y para su grupo de paniaguados ha sido un éxito.
Si se mide por la influencia lograda por el régimen, la conclusión es la misma. Venezuela se ha convertido en una generosa colonia y los operadores políticos de la DGI cubana orientan, controlan o influyen en una docena de desdichados países latinoamericanos, al extremo de que la paz colombiana se negocia en La Habana.
Pero si lo que se tiene en cuenta es la prosperidad general del país y el grado de felicidad genuina del conjunto de la población, ha sido un fracaso rotundo. A lo largo de tres generaciones los cubanos han sufrido miles de fusilamientos, han sido encarcelados decenas de millares de presos políticos, se han exiliado millones de personas, y el gobierno ha erigido el modo de creación de riquezas más improductivo de la historia, mientras demolía meticulosamente la estructura material que había heredado. Es “el arte de hacer ruinas” en su máxima expresión.
En 57 años de control absoluto del poder, los Castro han agravado hasta el martirio los elementos clave de la vida cotidiana: la alimentación y el acceso al agua potable, la vivienda, el transporte, las comunicaciones, el suministro de electricidad, la ropa y el calzado. De ese tétrico panorama escapan, como siempre, los millares de cubanos en estos días varados en Costa Rica, compasivamente cuidados por el gobierno y el pueblo de ese ejemplar país.
Esos nefastos resultados no son en realidad producto de la maldad, sino de la ignorancia, la ambición de poder y la arrogancia revolucionaria emanada de las certezas marxistas. Estaban dispuestos a matar y a hacer daño con tal de mantenerse en el poder y obligar a los cubanos a vivir de acuerdo con la utopía que se les había alojado en sus enfebrecidas cabecitas. Por eso han devastado al país.
¿Qué pasará en el futuro? Nada sustancial. Mientras no desaparezcan o se retiren de la vida pública los Castro y su camarilla, y mientras ese sistema, hoy transformado en Capitalismo Militar de Estado, permanezca en pie, el país seguirá condenado a la emigración masiva de cubanos desesperados y a la improductividad más radical.
El problema de fondo radica en las percepciones y en la confianza que emana de ellas. Da igual si los estadounidenses le quitan el embargo o si aumenta sustancialmente el número de turistas. Da igual si el presidente Obama visita Cuba, como los últimos tres Papas, y hace un discurso a favor de la libertad.
Los cubanos, como regla general, no creen en el sistema. No creen en sus compatriotas. No creen en el destino del país. No creen en quienes los dirigen, y mucho menos en la capacidad de esa burocracia adormilada y torva que imperturbablemente continúa practicando la planificación centralizada. Todo eso comenzará a cambiar después de enterrado el castrismo. Nunca antes.
Firmas/Carlos Alberto Montaner/Internet Photos/Extractos/TheCubanHistory.com
The Cuban History, Hollywood.
Arnoldo Varona, Editor.