THE ROLLING STONES REVOLUTION IN CUBA.
Successfully solved the visit of Barack Obama, the next chapter of the opening of Cuba to the world it will not take long. Rather nothing. It’s here: on Friday, the songs of the Rolling Stones soundtrack put a crucial period of political and cultural thaw recently, just a year, looked like a science fiction movie. “Hello Cuba! We are very happy to play for you. We have played many amazing places, but this concert in Havana will be historic for us,” admits Mick Jagger in a video as a greeting to the Cuban public. One country, Cuba, the last communist stronghold in America, where rock music was ostracized by “ideological deviation” in the hard times of the orthodoxy of the Castro brothers.
The concert of the Rolling Stones not be far show that the British group has developed over the previous twelve concerts in Latin America. With a repertoire truffled infallible songs, the soundtrack of habanero landing strong bet from minute one with two initial pieces like Jumpin ‘Jack Flash and It’s only rock and roll (but I like it). They no shortage stonianos classics like Angie, Paint it black, Gimme shelter and Sympathy for the devil. As a farewell song best epilogue by Cuban concert mythical verses (I Can not Get No) Satisfaction is not fancy.
There will be musical surprises, as is tradition in the Stones concert. The group has opened a poll on its website for the Cuban public selected for the concert in Havana a song. Already occurred in Brazilian concerts in São Paulo and Porto Alegre (She’s a rainbow and Let’s spend the night together, respectively), Bogota (Dead flowers), Lima (Like a rolling stone) and Mexico City (Let’s spend the night together) . In his historic visit to Cuba, the group offers poker aces formed by You got me rocking, Get off my cloud, She’s so cold and All down the line. And behind these four songs a subliminal message to an audience that for decades was stolen from the legitimate right to listen to rock music or whatever he pleased?
MUSIC STATE PROPERTY
Much has happened since in the sixties and seventies was impossible to hear songs of Western artists in Cuban broadcasters radio, true reference to probe the Cuban public taste for music. In Cuba, perhaps one of the towns most sincere appreciation for music and home to a handful of rhythms that came to conquer the world, and they did, it was not easy to find recordings of artists from across the political wall built from January 1, 1959. the day he arrived commander and commanded silence.
In Cuba for years the simple exercise at home have rock music, and jazz, pop or something that smacked the outside imperialist enemy, forced to deploy a panoply of maneuvers of distraction. One of the most common was “disguise” of salsa, Cuban bolero or are prohibited discs. Thus came home group covers proven loyalty to the Castro Revolution as Los Van Van when in fact what was inside were songs of Lennon and McCartney, Led Zeppelin and Black Sabbath. Or that a folder illustrated with the face of Benny Moré really camouflaged Mick Jagger.
Far and the years in which Fidel Castro himself came to make a steel border against anything that smacked of “ideological deviation” by young Cubans who wanted and could not wear “pants too tight”, is now expected everything starts to change with the visit of the Stones. And the enthusiasm that the components of seminal British group have shown in prior to his landing at Jose Marti airport no little optimism encourages dates. “Thank you for welcoming us to your beautiful country,” said Mick Jagger in the recorded greeting during Olé 2016 Latin American tour that will conclude in the Ciudad Deportiva de La Habana morning after completing triumphant tour in Chile, Argentina, Uruguay, Brazil, Peru, Colombia and Mexico.
FREEDOM PIRATE
The historic concert in Cuba have already leaked some details of the night is expected in the Sports City of Havana, not far from the Revolution Square where a couple of days ago President Obama was allowed to portray before the statue of the hero national, José Martí, and to the facades illustrated with profiles of Che and Camilo Cienfuegos, two landmarks of the Revolution that are no longer to see how the rock music of the enemy, as labeled in the hard years of Castroism, finally it comes to knock down one of the cultural walls that remained standing in the ruling party in Cuba.
Because the street, as you know, goes free thanks to the constant movement of pirated discs, digital memories with content not allowed in the country and the growing contribution of shipping to the island by the hundreds of thousands of exiles. In Havana, finally, it will be a concert in conditions. Mick Jagger can jump on a stage of eighty meters installed outdoors and the thousands of attendees viewers (unlike the rest of concerts Olé tour, the Cuban recital is free) will have a dozen giant screens not to miss the show their satanic majesties.
Agencies / El Español / Carlos Fuentes / Internet Photos / YouTube / Excerpts.
THE CUBAN HISTORY, HOLLYWOOD.
Arnoldo Varona, Editor.
CUBA PHOTOS.
LLEGÓ LA REVOLUCIÓN DE LOS ROLLING STONES A CUBA.
Solventada con éxito la visita de Barack Obama, el siguiente capítulo de la apertura de Cuba al mundo no tardará mucho. Más bien nada. Ya está aquí: el viernes, las canciones de los Rolling Stones pondrán banda sonora a un periodo crucial del deshielo político y cultural que hace poco, apenas un año, parecía una película de ciencia ficción. “¡Hola Cuba! Estamos muy felices de tocar para ustedes. Hemos tocado en muchos lugares increíbles, pero este concierto en La Habana será histórico para nosotros”, admite Mick Jagger en un vídeo a modo de saludo al público cubano. Un país, Cuba, el último reducto comunista en América, en el que la música rock estuvo condenada al ostracismo por “diversionismo ideológico” en la época dura de la ortodoxia de los hermanos Castro.
El concierto de los Rolling Stones no distará mucho del espectáculo que el grupo británico ha desarrollado en los doce conciertos anteriores en América Latina. Con un repertorio trufado de canciones infalibles, la banda sonora del desembarco habanero apostará fuerte desde el minuto uno con dos piezas iniciales como Jumpin’ Jack Flash y It’s only rock and roll (but I like it). Tampoco faltarán clásicos stonianos como Angie, Paint it black, Gimme shelter y Sympathy for the devil. Como canción de despedida no se antoja mejor epílogo del concierto cubano que los versos míticos de (I can’t get no) satisfaction.
Habrá sorpresas musicales, como ya es tradición en los conciertos de los Stones. El grupo ha abierto una encuesta en su página web para que el público cubano seleccione una canción para el recital de La Habana. Ya ocurrió en los conciertos brasileños en São Paulo y Porto Alegre (She’s a rainbow y Let’s spend the night together, respectivamente), Bogotá (Dead flowers), Lima (Like a rolling stone) y Ciudad de México (Let’s spend the night together). En su histórica visita a Cuba, el grupo ofrece un póquer de ases formado por You got me rocking, Get off my cloud, She’s so cold y All down the line. ¿Y esconden estas cuatro canciones un mensaje subliminal para un público que durante décadas fue hurtado del legítimo derecho de escuchar rock o cualquier música que le viniera en gana?
MÚSICA PROPIEDAD ESTATAL
Mucho ha llovido ya desde que en los años sesenta y setenta fuera imposible escuchar canciones de artistas occidentales en las emisoras de radio cubanas, verdadera referencia para sondear el gusto del público cubano por la música. En Cuba, quizá uno de los pueblos con mayor aprecio sincero por la música y cuna de un puñado de ritmos que salieron a conquistar al mundo, y lo lograron, tampoco era fácil encontrar grabaciones de artistas del otro lado del muro político levantado a partir del 1 de enero de 1959. El día que llegó el comandante y mandó callar.
En Cuba durante años el simple ejercicio de disponer en casa de música rock, y también jazz, pop o algo que oliera al enemigo imperialista exterior, obligaba a desplegar toda una panoplia de maniobras de distracción. Una de las más habituales era “disfrazar” de salsa, bolero o son cubano los discos prohibidos. Así entraban en casa carátulas de grupos de fidelidad probada a la Revolución castrista como Los Van Van cuando en realidad lo que había dentro eran canciones de Lennon y McCartney, de Led Zeppelin y Black Sabbath. O que una carpeta ilustrada con la cara de Benny Moré realmente camuflara a Mick Jagger.
Lejos ya los años en los que el mismo Fidel Castro llegó a marcar una frontera de acero contra todo lo que sonara a “diversionismo ideológico” por parte de jóvenes cubanos que querían, y no podían, vestir “pantaloncitos demasiado ajustados”, ahora se espera que todo empiece a cambiar con la visita de los Stones. Y el entusiasmo que los componentes del seminal conjunto británico han mostrado en las fechas previas a su desembarco en el aeropuerto José Martí alienta no poco optimismo. “Gracias por darnos la bienvenida a su hermoso país”, señala Mick Jagger en el saludo grabado durante la gira Olé 2016 por Latinoamérica que concluirá mañana en la Ciudad Deportiva de La Habana tras haber completado periplo triunfal en Chile, Argentina, Uruguay, Brasil, Perú, Colombia y México.
LIBERTAD PIRATA
Del histórico concierto en Cuba ya han trascendido algunos detalles de la noche que se espera en la Ciudad Deportiva de La Habana, no muy lejos de la plaza de la Revolución donde hace un par de días el presidente Obama se dejó retratar ante la estatua del héroé nacional, José Martí, y ante las fachadas ilustradas con los perfiles del Che y de Camilo Cienfuegos, dos hitos de la Revolución que ya no están para contemplar cómo el rock, la música del enemigo, como se tildó en los años duros del castrismo, por fin viene para derribar una de las murallas culturales que aún quedaban en pie en el oficialismo en Cuba.
Porque la calle, ya se sabe, va por la libre gracias al trasiego constante de discos piratas, memorias digitales con contenidos no permitidos en el país y el aporte creciente de envíos a la isla por parte de los centenares de miles de exiliados. En La Habana, por fin, se verá un concierto en condiciones. Mick Jagger podrá saltar sobre un escenario de ochenta metros instalado al aire libre y los miles de espectadores asistentes (a diferencia del resto de conciertos de la gira Olé, el recital cubano es gratuito) tendrán una docena de pantallas gigantes para no perder detalle del espectáculo de sus satánicas majestades.
Agencies/El Español/Carlos Fuentes/Internet Photos/YouTube/Excerpts.
THE CUBAN HISTORY, HOLLYWOOD.
Arnoldo Varona, Editor.