For Cristobal Colon and their companions was an event the presence of them first smoking native of these lands of the called new world. In October, 1492 saw them pass in front of themselves canoe and made an aside in his journal of navigation. Days later, the 6 of November, Fray Bartolome of them houses writes about “herbs dry tucked in a certain sheet, dry also, to way of musket made of paper (…)” “and powered by a point and the other suck (…) then they numb and almost drunk, and you don’t feel tiredness”. That was the vision that had tobacco.
Cuban Don Fernando Ortiz said that “tobacco is the most universally known gift America gave to humanity”. Such assertion, although risky, becomes a sort of invitation to meditate on the subject.
The tobacco is presence Aboriginal, surprising and primal from the arrival of them European and also in them struggles, from them times of the hoist and execution of them vegueros rebel before the monopoly tax by the metropolis on Cuba and the marketing of the tobacco, by the remote 1721.
Then, during the process for independence, the Cuban tobacco worker, from emigration, is again stronghold of revolution concocted by José Martí. And in the decades of the century XX, another time, the worker of them chosen, of them tobacconists, becomes one of them more enthusiasts and hardened propellants of the fight obrera.
Who probe in it history homeland will discover a number appreciably of Patriots, leaders Union, personalities of the music, the lyrics and of other spheres of the happen social Cuban whose estate are imbricated to it industry tobacco.
In addition, tobacco is one of the products most representative of our nationality. “The tobacco of the island of Cuba is famous in all parts of Europe where is smoke”, wrote the baron Alejandro’s Humboldt as a result of the visit that us made in 1800.
But if you want to delve into the history of single tobacco has to be the Mercaderes street number 120, high, between Bishop and would work. In this singular museum can learn about the interrelationship of tobacco with the arts, Linguistics, customs, idiosyncrasies and much activity has been within the vast borders of our nationality.
In the Museum of the tobacco the visitor will recognize among them faces photographed, some of them celebrities that made of the Tan or of the cigarette one of its delights favorite: Winston Churchill, José Lezama Lima, Arthur Rubinstein, Nat King Cole, and many others.
Centuries of tradition and quality, of history and legend endorse this smoking history of the tobacco, of which only have could offer you a puff, that hope has been of your pleasure.
Agencies/Rad.Enciclopedia/Juan B. Rodriguez/Internet Photos/Arnold Varona/TheCubanhistory.com
THE CUBAN HISTORY, HOLLYWOOD.
UNA BOCANADA DE HUMO EN LA HISTORIA CUBANA.
Para Cristóbal Colón y sus compañeros constituyó un acontecimiento la presencia de los primeros fumadores autóctonos de estas tierras del llamado Nuevo Mundo. En octubre de 1492 los vio pasar frente a sí en canoa, e hizo un aparte en su Diario de Navegación. Días después, el 6 de noviembre, Fray Bartolomé de las Casas escribe acerca de “hierbas secas metidas en una cierta hoja, seca también, a manera de mosquete hecho de papel (……) y encendido por una punta y por la otra chupan (….) entonces se adormecen y casi se emborrachan, y que no sienten el cansancio”. Esa fue la visión que tuvo del tabaco.
El sabio cubano Don Fernando Ortiz dijo que “el tabaco es el regalo más universalmente conocido que América dio a la humanidad”. Tal aseveración, si bien arriesgada, deviene una suerte de invitación a meditar sobre el tema.
El tabaco es presencia aborigen, sorprendente y primigenia desde la llegada de los europeos y también en las luchas, desde los tiempos del alzamiento y ejecución de los vegueros rebeldes ante el monopolio impuesto por la metrópoli sobre Cuba y la comercialización del tabaco, por el remoto 1721.
Luego, durante el proceso por la independencia, el obrero tabacalero cubano, desde la emigración, es de nuevo baluarte de la Revolución gestada por José Martí. Y en las décadas del siglo XX, otra vez, el trabajador de las escogidas, de las tabaquerías, deviene uno de los más entusiastas y aguerridos propulsores de la lucha obrera.
Quien hurgue en la historia patria descubrirá un número apreciable de patriotas, líderes sindicales, personalidades de la música, las letras y de otras esferas del acontecer social cubano cuyas raíces están imbricadas a la industria tabacalera.
Además, el tabaco es uno de los productos más representativo de nuestra nacionalidad. “El tabaco de la isla de Cuba es célebre en todas partes de Europa donde se fume”, escribía el barón Alejandro de Humboldt a raíz de la visita que nos hizo en 1800.
Pero si usted desea profundizar en la historia del tabaco solo tiene que llegarse a la calle Mercaderes número 120, altos, entre las calles Obispo y Obraría. En este singular Museo podrá conocer de la interrelación del tabaco con las artes, la lingüística, las costumbres, la idiosincrasia y cuanta actividad haya dentro de las vastas fronteras de nuestra nacionalidad.
En el Museo del Tabaco el visitante reconocerá entre los rostros fotografiados, algunos de las celebridades que hicieron del habano o del cigarrillo uno de sus deleites preferidos: Winston Churchill, José Lezama Lima, Arthur Rubinstein, Nat King Cole, y tantos otros.
Siglos de tradición y calidad, de historia y leyenda avalan esta humeante historia del tabaco, de la que solo hemos podido ofrecerle una bocanada, que esperamos haya sido de su agrado.
Agencies/Rad.Enciclopedia/Juan B. Rodríguez/Internet Photos/Arnoldo Varona/TheCubanhistory.com
THE CUBAN HISTORY, HOLLYWOOD.