CUBA TODAY: RADIOGRAPHY OF SANTIAGO DE CUBA. (PHOTOS).
When the past December 4 Fidel Castro was buried in a private ceremony in Santiago, the world put their eyes in this town in Eastern Cuba. Apart from the cemetery of Santa Efigênia, where he was buried and the plaza de la Revolución, where honored.
Santiago de Cuba is a huge deep dish. A city surrounded by a mountain range which gives, from above, certain air of Roman Colosseum. A moving city, with a continuous seismic activity and a huge door to the Caribbean Sea. Santiago de Cuba is a crater in the middle of a forest. Founded in the far 1515 by the Spanish conqueror Diego Velázquez, Santiago was the first capital of Cuba: moist, warm, sound. It is probably the only city in the country where the history is not an old parchment.
Today taxis are motorcycle and avenues appear to a mound of scrambled eggs. The maniseros roam the streets with a metal pail on boiling coal to keep the cones peanuts and a stick of wood or zinc to hit the Tin and spread. Men orchestras. All the time, everywhere, Santiago is a concert of Chamber music played by maniseros with sticks and cans.
With its nearly 500,000 inhabitants, Santiago called the Earth warm. It is matte of the conga, the mass dance. It is where better sound drums and Chinese trumpet, where best waist sway women. Pure spontaneity. The entire neighborhoods challenge each other with chants and corridors, moving throughout the city as if the grooves are a giant square dance. A tsunami that sweeps and loaded with all, unstoppable, carburizing alcohol in industrial quantities.
If someone thinks he knows dance, you must go to Santiago de Cuba to pass their aptitude test. To its Carnival, the best, with distance from the island.
Santiago de Cuba inside today. (The two Vista Alegre).
The new Vista Alegre neighborhood was the first deal to be built in the province after the triumph of the revolution in 1959. A flat quarter, no personality, no buildings and dusty streets. A powder that remains embedded in clothing, in the body and in the walls of the houses that ever should have had some paint over.
What distinguishes the new Vista Alegre is the noise that never ceases. Avenue 40 they spend huge dredges (truck) loaded with products that leave the port and called universal stores. The route crosses the cast. And when ceases the din of harrows, hear the chirp of horse carts. There is no chance for peace.
The Old Vista Alegre.
The new Vista Alegre is the flip side of Vista Alegre, a neo-colonial bourgeois neighborhood located almost in the center of the city. A cast of houses with patios, a silence that only breaks with the wind that moves the leaves of the trees. Their streets and their sidewalks are paved.
Before 1959, the dictator Fulgencio Batista had in Vista Alegre one of his residences in rest. Alberto Alfonso Valdés, bricklayer and head of a work was in July working at foot of Sun. According to him because after 2018, “this is the place chosen by President Raúl Castro for his retirement”. “By that are working here from now to condition you the residence by indication of the party”, says. If happens, Raul Castro not is will go to rest to the deteriorated cast built by his revolution, but to the neighborhood bourgeois where rested the tyrant that he and his brother overthrew, for then lift is them with the power. (It will continue 1 4).
Agencies/Univision/Abraham Jimenez Enso/Excerpts/ Internet Photos / Arnoldo Varona / TheCubanHistory.com
THE CUBAN HISTORY, HOLLYWOOD.
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CUBA HOY: RADIOGRAFÍA DE SANTIAGO DE CUBA. (FOTOS).
Cuando el pasado 4 de diciembre Fidel Castro fue enterrado en una ceremonia privada en Santiago, el mundo puso sus ojos en esta localidad del oriente cubano. Más allá del cementerio de Santa Efigenia, donde fue enterrado y de la plaza de la revolución, donde lo homenajearon.
Santiago de Cuba es un enorme plato hondo. Una ciudad rodeada por una sierra montañosa que le otorga, desde arriba, cierto aire de coliseo romano. Una ciudad movediza, con una continua actividad sísmica y una enorme puerta al mar Caribe. Santiago de Cuba es un cráter en medio de un bosque. Fundada en el lejano 1515 por el conquistador español Diego Velázquez, Santiago fue la primera capital de Cuba: húmeda, cálida, sonora. Es probablemente la única ciudad del país donde la historia no es un pergamino viejo.
Hoy los taxis son motos y las avenidas parecen un hormiguero revuelto. Los maniseros andan por las calles con una lata metálica encendida con carbón hirviendo para mantener calientes los cucuruchos de maní y con un palito de madera o de cinc para golpear la lata y pregonar. Hombres orquestas. A toda hora, por todos lados, Santiago es un concierto de música de cámara interpretado por maniseros con palitos y latas.
Con sus casi 500,000 habitantes, a Santiago le llaman la tierra caliente. Es la mata de la conga, del baile en masa. Es donde mejor suenan los tambores y la trompeta china, donde mejor cintura contonean las mujeres. Puro desenfado. Los barrios enteros se retan con cánticos y pasillos, moviéndose por toda la ciudad como si las entrecalles fueran una plazoleta gigante de baile. Un tsunami que arrasa y carga con todos, indetenible, carburando alcohol en cantidades industriales.
Si alguien cree que sabe bailar, debe ir a Santiago de Cuba a pasar su prueba de aptitud. A sus carnavales, los mejores, con distancia, de toda la isla.
Santiago de Cuba por Dentro Hoy. (Los Dos Vista Alegre).
El barrio Nuevo Vista Alegre fue el primer reparto construido en la provincia después del triunfo de la Revolución en 1959. Un barrio chato, sin personalidad, sin edificios y con mucho polvo en las calles. Un polvo que no deja de incrustarse en la ropa, en el cuerpo y en las paredes de las casas que alguna vez debieron haber tenido alguna pintura encima.
Lo que distingue al Nuevo Vista Alegre es el ruido que nunca cesa. Por la avenida 40 pasan inmensas rastras (camiones) cargadas de productos que salen del puerto y de los llamados Almacenes Universales. La ruta atraviesa el reparto. Y cuando cesa el estruendo de las rastras, se escucha el chirrido de las carretillas de caballos. No hay cabida para el sosiego.
El Viejo Vista Alegre.
El Nuevo Vista Alegre es la otra cara de Vista Alegre, un barrio burgués neocolonial ubicado casi en el centro de la ciudad. Un reparto de caserones con patios, de un silencio sepulcral que solo se rompe con el viento que mueve las hojas de los árboles. Sus calles y sus aceras están asfaltadas.
Antes de 1959, el dictador Fulgencio Batista tenía en Vista Alegre una de sus residencias de descanso. Alberto Alfonso Valdés, albañil y jefe de una obra estaba en julio trabajando a pie de sol. Según él porque “después de 2018, este es el lugar escogido por el presidente Raúl Castro para su retiro”. “Por eso estamos trabajando aquí desde ya para acondicionarle la residencia por indicación del Partido”, afirma. Si sucede, Raúl Castro no se irá a descansar al deteriorado reparto construido por su Revolución, sino al barrio burgués donde descansaba el tirano que él y su hermano derrocaron, para luego alzarse ellos con el poder. (Continuará 1 de 4).
Agencies/Univision/ Abraham Jiménez Enoa/Extractos/ Internet Photos/ Arnoldo Varona/ TheCubanHistory.com
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