Cuban President Raul Castro harshly criticized U.S. President Donald Trump’s immigration, trade and other policies on Sunday as Trump reviews a fragile detente with Communist-run Cuba begun by his predecessor Barack Obama.
Before taking office, Trump threatened to torpedo the detente between the former Cold War foes unless a “better deal” could be struck, without providing details.
The White House said last month it was in the middle of “a full review of all U.S. policies toward Cuba.”
In his first critical remarks directed at Trump since he took office, Castro termed his trade policies “egotistical” and his plan to build a wall along the Mexican border “irrational.”
Castro said: “The new agenda of the U.S. government threatens to unleash an extreme and egotistical trade policy that will impact the competitiveness of our foreign trade; violate environmental agreements … hunt down and deport migrants.”
He said migration was due to growing inequality and poverty caused by an unjust international economic system and that a wall along the Mexican border was therefore “irrational” and aimed at all Latin Americans, not just Mexicans.
“You can’t contain poverty, catastrophes and migrants with walls, but with cooperation, understanding and peace,” Castro said.
Seeking to reverse more than 50 years of U.S. efforts using isolation to force Cuba to change, Obama agreed with Castro in December 2014 to work to normalize relations.
The two close neighbors have since restored diplomatic ties and signed cooperation agreements.
Obama, a Democrat, used executive orders to circumvent the longstanding U.S. trade embargo on Cuba and ease some restrictions on travel and business. The embargo can only be lifted by the U.S. Congress, which is controlled by Republicans.
Travel to the Caribbean island from the United States has increased, with the start of direct flights and cruises and roaming agreements signed, but no manufacturing or significant trade deals have yet been agreed.
Agencies/Reuters/Marc Frank/Excerpts/Internet Photos/Arnoldo Varona/TheCubanHistory.com
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EL GOBIERNO CUBANO ATACA LAS POLÍTICAS PROPUESTAS POR LOS EEUU COMO “IRRACIONAL” AND “EGOISTICAS”.
El presidente cubano, Raúl Castro, criticó duramente las políticas de inmigración, comercio y otras políticas del presidente estadounidense, Donald Trump, el domingo, mientras Trump revisa una frágil distensión con la Cuba dirigida por los comunistas, iniciada por su predecesor Barack Obama.
Antes de asumir el cargo, Trump amenazó con torpedear la distensión entre los antiguos enemigos de la Guerra Fría, a menos que se pudiera lograr un “mejor trato”, sin proporcionar detalles.
La Casa Blanca dijo el mes pasado que estaba en medio de “una revisión completa de todas las políticas estadounidenses hacia Cuba”.
En sus primeros comentarios críticos dirigidos a Trump desde que asumió el poder, Castro calificó sus políticas comerciales de “egoístas” y su plan de construir un muro a lo largo de la frontera mexicana “irracional”.
Castro dijo: “La nueva agenda del gobierno de los Estados Unidos amenaza con desencadenar una política comercial extrema y egoísta que afectará la competitividad de nuestro comercio exterior, violará los acuerdos ambientales … caza y deportará a los migrantes”.
Dijo que la migración se debe a la creciente desigualdad y pobreza causada por un sistema económico internacional injusto y que un muro a lo largo de la frontera mexicana era por lo tanto “irracional” y dirigido a todos los latinoamericanos, no sólo a los mexicanos.
“No se puede contener la pobreza, las catástrofes y los migrantes con muros, sino con cooperación, entendimiento y paz”, dijo Castro.
En un intento de revertir más de 50 años de esfuerzos de los Estados Unidos por el aislamiento para obligar a Cuba a cambiar, Obama acordó con Castro en diciembre de 2014 trabajar para normalizar las relaciones.
Los dos vecinos cercanos han restaurado las relaciones diplomáticas y han firmado acuerdos de cooperación.
Obama, un demócrata, usó órdenes ejecutivas para eludir el antiguo embargo comercial de los Estados Unidos a Cuba y aliviar algunas restricciones en los viajes y negocios. El embargo sólo puede ser levantado por el Congreso de Estados Unidos, que es controlado por los republicanos.
El viaje a la isla caribeña desde Estados Unidos ha aumentado, con el inicio de vuelos directos y cruceros y acuerdos de roaming firmados, pero aún no se han acordado acuerdos manufactureros ni acuerdos comerciales significativos.
Agencias/Reuters/Marc Frank/Extractos/Internet Photos/Arnoldo Varona/TheCubanHistory.com
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