CUBANS IN SPORTS: “PAPA MONTERO”, “THE BLACK DIAMOND” AND THE FORGOTTEN “BOMBÍN” PEDROSO.
Cuban Baseball History has forever collected the distinguished names of Adolfo Luque, “Papá Montero” and José de la Caridad Méndez, “The Black Diamond” as the best pitchers Cuban baseball has ever had, but he has forgotten one of the most large but less known for its controversial presence in the box, that was Eustaquio “Bombín” Pedroso, the nickname acquired by his continued use of this type of hat.
He was born on September 20, 1886 and began playing baseball since he was a child on the grounds of October 10, the place where the Latin American stadium stands today. There with the teams of barefoot children, without gloves and with rudimentary bats made of stick, he outlined his quality.
He had surprising physical resistance and his batting was that of a power hitter. “Bombín” Pedroso had an amazing dominance in his curves that, according to what was said, adhered to perfection, despite these magnificent qualities and conditions, Pedroso was never a virtuoso of the national pastime.
He played the ball out of sheer need and he never give it any interest, say chronicles of those years. Baseball has never been among his worries. He led a turbulent and turbulent life outside the diamond and that led him to prison which overshadowed his exploits and greatness.
Gervasio ‘Strike’ Gonzalez, considered by the history of baseball as among the best receivers of Cuba of all time, when referring to Pedroso told a journalist, “… better than Méndez and Luque was Pedroso. He dominated the curves down like no other Cuban pitcher, his throws to the corners of the jon has no comparison “, depended mainly on his speed and could never undulate his offers as did Bombín, but this had a big defect, was somewhat neglected” and “Strike” González ended with this statement: “Luque and Méndez were wonderful pitchers, but Pedroso had more conditions than the two of them.”
“Bombín” enters professionalism with the Fe team, but it is the Almendares team with which he performs his memorable feats. He also worked with other groups such as Matanzas, San Francisco, White Sox, Cuban Stars, America, Bacharach Giants, Cuba and Santa Clara.
His performance in 1908 against the American team Indianapolis is relevant and a year later his name acquires touches of consecrated, it leaves without hits the Detroit Tigers, selected American League champion. In that way he became the first Cuban pitcher to leave a Major League team without hits. In 1913, “Bombín” continued to check the American teams from the mound. He blew the Brooklyn twice and allowed only seven singles.
The sporting chronicler of the USA of then Joe Jackson said in one of his chronicles about the singular Pedroso .. “That pitcher will not have a great reputation, but in Cuba there is no better. I had never heard of him since my arrival in this country, but in my opinion he is a first class artist. ”
Pedroso’s batting average was 294, with 186 hits in 633 times at bat. He also fired 20 doubles, 10 triples and 3 homers, scored 83 runs and stole 21 bases.
Old and somewhat tired of the game, “Bombín” Pedroso threw a perfect game against the Bulls of Paredes on Sunday, November 6, 1932. The farewell of the mound was approaching.
The tumultuous life of this great of yesterday makes it often obviate when talking about the best architects of the box on the island. When the true value is made, the name and figure of Eustaquio “Bombín” Pedroso must be included in the elite’s pages where the memory of the best baseball players of all time in Latin American baseball is kept.
CUBANOS EN DEPORTES: “PAPÁ MONTERO”, “EL DIAMANTE NEGRO” Y EL OLVIDADO “BOMBÍN” PEDROSO
La Historia beisbolera cubana ha recogido para siempre los distinguidos nombres de Adolfo Luque, “Papá Montero” y José de la Caridad Méndez, “El Diamante negro” como los mejores lanzadores que ha tenido el béisbol cubano, pero ha olvidado a uno de los más grandes aunque menos conocido por su controversial presencia en el box, ese fue Eustaquio “Bombín” Pedroso, el mote lo adquirió por su continuo uso de este tipo de sombrero.
Nació el 20 de septiembre de 1886 y comenzó a jugar el beisbol desde niño en los terrenos de 10 de octubre, lugar donde se levanta hoy el estadio Latinoamericano. Allí con los equipos de niños descalzos, sin guantes y con bates rudimentarios hechos de palo, perfiló su calidad.
Contaba con una sorprendente resistencia física y su bateo era el de un bateador de fuerza. “Bombín” Pedroso tenía un asombroso dominio en sus curvas que según se decía, lindaban con la perfección. A pesar de esas magníficas cualidades y condiciones, Pedroso nunca fue un virtuoso del pasatiempo nacional.
Jugaba a la pelota por pura necesidad y nunca le dedico interés, aseguran crónicas de aquellos años. Entre sus preocupaciones jamás estuvo el béisbol. Llevó una vida agitada y turbulenta fuera del diamante y eso lo condujo a la cárcel lo cual opacó sus hazañas y grandezas.
Gervasio ‘Strike’ González, considerado por la historia del béisbol como entre los mejores receptores de Cuba de todos los tiempos, al referirse a Pedroso dijo a un periodista, “.. mejor que Méndez y Luque fue Pedroso. Dominaba las curvas hacia abajo como ningún otro pitcher cubano, sus lanzamientos hacia las esquinas del jon no tiene comparación”, dependía principalmente de su velocidad y nunca pudo ondular sus ofertas como lo hacía Bombín, pero este tuvo un gran defecto, era algo descuidado” y terminaba ‘Strike’ González con esta afirmación: “Luque y Méndez fueron pitchers maravillosos, pero Pedroso tenia mas condiciones que ellos dos”.
“Bombín” entra al profesionalismo con el equipo Fe, pero es el conjunto Almendares con el que realiza sus proezas memorables. También se desempeñó con otros combinados como Matanzas, San Francisco, White Sox, Cuban Stars, América, Bacharach Giants, Cuba y el Santa Clara.
Su actuación en 1908 frente al equipo estadounidense Indianápolis es relevante y un año más tarde su nombre adquiere ribetes de consagrado, pues deja sin hits a los Tigres del Detroit, seleccionado campeón de la Liga Americana. De esa manera se convirtió en el primer lanzador cubano que dejaba sin imparables a un combinado de Grandes Ligas. En 1913, “Bombín” continuó dándoles jaque a los equipos estadounidenses desde el montículo. Blanqueó al Brooklyn en dos ocasiones y solo permitió siete sencillos.
El cronista deportivo de EEUU de entonces Joe Jackson dijo en una de sus crónicas sobre el singular Pedroso ..“Ese pitcher no tendrá gran reputación, pero en Cuba no lo hay mejor. Nunca había oído hablar de él desde mi llegada a este país, pero a mi juicio es un artista de primera clase”.
El promedio al bate de Pedroso fue de 294, con 186 hits en 633 veces al bate. También disparó 20 dobles, 10 triples y 3 jonrones, anotó 83 carreras y se robó 21 bases.
Viejo y un tanto cansado del juego, “Bombín” Pedroso lanzó un juego perfecto contra los Toros de Paredes el domingo 6 de noviembre de 1932. Se acercaba la despedida del montículo.
La vida tumultuosa de este grande del ayer hace que a menudo se le obvie cuando se habla de los mejores artífices del box en la isla. Cuando se hace la verdadera valorización, el nombre y la figura de Eustaquio “Bombín” Pedroso hay que incluirlo por derecho propio en las páginas de la élite donde se guarda el recuerdo de los mejores peloteros de todos los tiempos del béisbol latinoamericano.
Agencies/Palenque/Gilberto Dihigo/Internet Photos/ Arnoldo Varona/ TheCubanHistory.com
THE CUBAN HISTORY, HISTORY.