El servicio postal en nuestro verde caimán se estableció en 1756. Diariamente salía de La Habana, a las doce de la noche, un jinete, llamado correo o corredor que llevaba la correspondencia y paquetes a las diferentes villas del archipiélago antillano.

Iba cambiando de caballo para poder llegar hasta los Tenientes de Correos Mayor, que así llamaban a los que tenían la alta responsabilidad de esperar y, posteriormente, distribuir la correspondencia entre los interesados. No fallaba aunque hubiese temporales, ciclones, solo retenía por breves días el destino seguro de las cartas.

En 1839, en la administración del Director de Correos de la Isla de Cuba, Santiago Capetillo y Nocedal, hubo notables cambios en el servicio del correo, al emplear el ferrocarril como medio de transporte. Años más tarde, para validar la tramitación de los envíos postales se aplican los primeros cuños con fechas de expedición y recepción.

También a Cuba llegó el telégrafo, en 1853, cuando se inauguró en el tramo entre La Habana y Bejucal.

Dos años después, La Habana propuso a sus habitantes un nuevo servicio postal. En diferentes puntos de la ciudad, se ubicaron buzones y se inició la distribución del correo a domicilio por medio de ese personaje importante de los barrios: el cartero.

Pero los tiempos cambian; la ciencia y la tecnología avanzan más rápido que un caballo, trenes, ómnibus y hasta aviones. Con la era digital, se impuso el correo electrónico, y los mensajes desde los móviles.

CUBA CELEBRATES THE 263 ANNIVERSARY OF THE POSTAL SERVICE.

The postal service in our green alligator was established in 1756. Every day at twelve o’clock in the evening, a horseman, called mail or a runner carrying correspondence and packages to the different towns of the Antillean archipelago, left Havana every day.

He was changing his horse to be able to reach the Lieutenants of Correos Mayor, who thus called those who had the high responsibility to wait and, subsequently, distribute correspondence among those interested. It did not fail even if there were temporary, cyclones, only retained for a few days the safe destination of the cards.

In 1839, in the administration of the Postmaster of the Island of Cuba, Santiago Capetillo, and Nocedal, there were notable changes in the mail service, by using the railroad as a means of transport. Years later, to validate the processing of postal items, the first stamps with delivery and receipt dates are applied.

The Telegraph also arrived in Cuba in 1853, when it was inaugurated on the stretch between Havana and Bejucal.

Two years later, Havana proposed new postal service to its inhabitants. In different points of the city, mailboxes were located and the distribution of the mail to domicile began by means of that important personage of the neighborhoods: the postman.

But times change; Science and technology advance faster than a horse, trains, buses, and even airplanes. With the digital age, e-mail was imposed, and messages from mobile phones.

Agencies/ Radio Encyclop./ Juan B. Rodríguez/ Internet Photos/ Arnoldo Varona/ www.TheCubanHistory.com
THE CUBAN HISTORY, HOLLYWOOD.