En lo que va de 2019, unos 5 mil cubanos llegaron a Managua en un vuelo de la empresa venezolana Conviasa con supuestos fines “turísticos”. Pero enseguida salieron del país con rumbo Norte.

Apenas un mes antes, la cantidad de migrantes originarios de la isla detenidos en México había logrado la suficiente fuerza como para generar varios motines que dejaron decenas de heridos, decenas de fugas y cientos de deportaciones hacia La Habana.

En diciembre de 2015, cuando más de 3.000 migrantes cubanos llegaron a la frontera sur de Nicaragua desde Costa Rica, Managua hizo honor a su propaganda de “muro de contención”: soldados y policías fueron enviados a la frontera, hubo disparos, gases lacrimógenos y despliegue de helicópteros y vehículos militares recorriendo las fronteras. El “muro de contención” que cerró aquella vez las fronteras, se agrietó inesperadamente el 23 de enero de 2019, cuando Nicaragua flexibilizó las condiciones para otorgar visas de turistas a los cubanos.

Investigaciones periodísticas del diario La Prensa de Nicaragua, estimaron que en promedio viajan desde La Habana y Sudamérica hacia Managua unos cien cubanos por día. En mayo pasado, la directora de promoción y mercadeo del estatal Instituto Nacional de Turismo de Nicaragua, Ana Carolina García, reveló a la televisión oficialista que las visitas desde la isla aumentaron luego de que la aerolínea venezolana Conviasa iniciara una ruta La Habana-Managua-Caracas tres veces por semana.

Y hasta mayo, según el dato oficial, un poco más de 5.000 cubanos habían ingresado a Nicaragua, supuestamente atraídos por la belleza de sus 21 estructuras volcánicas. Un año atrás, en 2018, la cifra de turistas desde ese destino fue de 566.

Sin embargo, la presidenta de la empresarial Cámara Nacional de Turismo de Nicaragua, Lucy Valenti, en declaraciones a la prensa este junio dijo que de la citada cifra oficial de turistas caribeños no tenían una certeza de su destino: “Nosotros hemos hecho averiguaciones, hemos preguntado a los hoteles, restaurantes y turoperadoras si han visto a esos cubanos y nadie sabe dónde se están quedando, nadie lo sabe”.

Ni en el aeropuerto internacional, ni en las oficinas de Migración y Extranjería y tampoco en las oficinas de Conviasa en la terminal aérea, se da información del destino de los visitantes de la isla.

Mientras tanto, la migración ilegal atravesaba puntos ciegos de la frontera sur de Nicaragua.

Migrantes cubanos que fueron detenidos por Migración nicaragüense y llevados al albergue para extranjeros, denunciaron que pagaban hasta 150 dólares para ingresar desde Costa Rica y otro tanto para llegar hasta la frontera con Honduras, en ruta al “imperio”, como suelen llamar los gobiernos de Cuba, Nicaragua y Venezuela a Estados Unidos.

Así estuvo funcionando el tránsito hasta 2018, pero con la nueva ruta todo ha cambiado: los cubanos compran el boleto en La Habana y pagan 30 dólares de visa, una vez en Nicaragua pagan 10 dólares de una tarjeta de turismo y se les permite circular libremente por 90 días.

Vienen entre 80 y 90 pasajeros en el vuelo 7701 de Conviasa desde La Habana en sus tres frecuencias semanales: lunes, miércoles y viernes entre las 6:50 y 7:15 pm. De otros vuelos nocturnos desde Sudamérica, vienen en promedio entre 30 y 40 pasajeros cubanos al día.

Los migrantes de la isla suman aproximadamente 520 por semana y los vuelos de regreso salen casi vacíos: 30 como máximo, en ocasiones 20 y hasta 10 en un solo vuelo.

Los cubanos aprovechan el vuelo directo a Managua de la aerolínea venezolana como una oportunidad de oro para seguir hacia Estados Unidos

El Aeropuerto Augusto César Sandino de Managua se convirtió en una inesperada plataforma para los exiliados cubanos que buscan seguir camino a Estados Unidos.

La historia es la misma que la de unas 80 personas que viajaron con ellos de Cuba a Nicaragua. Aprovecharon la oportunidad del vuelo directo y, con ahorros de las remesas enviadas desde Florida, lograron reunir el dinero y reservar sus boletos.

Segun un nicaraguense entrevistado, la visita de los cubanos a Nicaragua.. “Más bien, pensaría que el movimiento migratorio de cubanos es un movimiento natural de personas desesperadas por salir de un país en ruinas, gobernado por una dictadura de partido único, que buscan llegar al ‘sueño estadounidense’ como muchos otros latinoamericanos y caribeños y Nicaragua lo permite mientras no se queden en su territorio”.

NICARAGUA, NEW CUBAN IMMIGRANTS TRAMPOLINE TO ARRIVE AT THE UNITED STATES.

So far in 2019, some 5 thousand Cubans arrived in Managua on a flight from the Venezuelan company Conviasa with supposed “tourist” purposes. But then they left the country in a North direction.

Just a month before, the number of migrants from the island detained in Mexico had achieved enough strength to generate several riots that left dozens injured, dozens of leaks and hundreds of deportations to Havana.

In December 2015, when more than 3,000 Cuban migrants arrived on the southern border of Nicaragua from Costa Rica, Managua honored its propaganda of “retaining wall”: soldiers and policemen were sent to the border, there were shots, tear gas and deployment of helicopters and military vehicles crossing the borders. The “retaining wall” that closed the borders that time, unexpectedly cracked on January 23, 2019, when Nicaragua relaxed the conditions for granting tourist visas to Cubans.

Journalistic investigations of the newspaper La Prensa of Nicaragua estimated that an average of one hundred Cubans travel daily from Havana and South America to Managua. Last May, the director of promotion and marketing of the Nicaraguan National Tourism Institute, Ana Carolina García, revealed to government television that visits from the island increased after Venezuelan airline Conviasa initiated a route between Havana and Managua. Caracas three times a week.

And until May, according to the official data, a little more than 5,000 Cubans had entered Nicaragua, supposedly attracted by the beauty of its 21 volcanic structures. A year ago, in 2018, the number of tourists from that destination was 566.

However, the president of the entrepreneurial National Chamber of Tourism of Nicaragua, Lucy Valenti, in statements to the press this June said that of the aforementioned official number of Caribbean tourists did not have a certainty of their destination: “We have made inquiries, we have asked the hotels, restaurants and tour operators if they have seen those Cubans and nobody knows where they are staying, nobody knows. ”

Neither in the international airport, nor in the Migration and Immigration offices, nor in the Conviasa offices in the air terminal, information is given on the destination of the island’s visitors.

Meanwhile, illegal migration crossed blind spots on the southern border of Nicaragua.

Cuban migrants who were detained by Nicaraguan Migration and taken to the shelter for foreigners reported that they paid up to 150 dollars to enter from Costa Rica and another to reach the border with Honduras, en route to the “empire”, as governments of Cuba, Nicaragua and Venezuela to the United States.

This is how the transit was working until 2018, but with the new route everything has changed: Cubans buy the ticket in Havana and pay 30 dollars for a visa, once in Nicaragua, they pay 10 dollars for a tourist card and they are allowed to move freely. for 90 days.

There are between 80 and 90 passengers on the 7701 flight from Conviasa from Havana on its three weekly frequencies: Monday, Wednesday and Friday between 6:50 and 7:15 pm. Of other night flights from South America, they average between 30 and 40 Cuban passengers per day.

Migrants from the island number approximately 520 per week and return flights leave almost empty: 30 at most, sometimes 20 and up to 10 on a single flight.

Cubans take advantage of the direct flight to Managua from the Venezuelan airline as a golden opportunity to continue to the United States

Augusto César Sandino Airport in Managua became an unexpected platform for Cuban exiles seeking to continue on their way to the United States.

The story is the same as that of some 80 people who traveled with them from Cuba to Nicaragua. They took the opportunity of the direct flight and, with savings of the remittances sent from Florida, managed to collect the money and reserve their tickets.

According to a Nicaraguan interviewee, the Cubans’ visit to Nicaragua … “Rather, I would think that the Cuban migratory movement is a natural movement of people desperate to leave a ruined country, governed by a single-party dictatorship, who seek reach the ‘American dream’ like many other Latin Americans and the Caribbean and Nicaragua allows it as long as they do not stay in their territory. ”

Agencies/ DDC/ Jose A. Silva/ Excerpts/ Extractos/ Internet Photos/ Arnoldo Varona/ www.TheCubanHistory.com
THE CUBAN HISTORY, HOLLYWOOD.