THE MYSTERIOUS “PERFECT CRIME” IN HAVANA OF RACHEL “THE ROSE OF FRANCE”
It was the first three months after our republic was founded when all of Cuba was shocked after one of the most publicized criminal events on the whole island and it was the murder of Rachel Dekeirsgeiter, a beautiful young woman who practiced prostitution in Havana and which was closely linked to the life of entertainment and entertainment.
RACHEL ARRIVES IN CUBA
Rachel Dekeirsgeiter arrived in Havana from France at the hands of Oscar Villaverde, one of those who brought young people to the Cuban capital who practiced the profession of “sosteneur”.
The “Rose of France” is described as beautiful, sophisticated, and highly sought after by men, including Villaverde, who made her official mistress. Rachel strutted around with anyone who gave her money, causing frequent fights among Habaneros who disputed her favors.
Oscar Villaverde was the owner of the famous Tokyo cabaret, on the corner of San Lázaro and Blanco. Alberto Jiménez Rebollar also sang in this nightclub. He was accompanied by the excellent music of the orchestra led by José Antonio Curbelo. Rumors circulated that Jiménez was also Rachel’s lover. The French woman practiced the oldest profession in the world in Tokyo.
RACHEL DISAPPEARS
But in December 1931, the beautiful 30-year-old French woman disappeared. For two days nothing was heard from her. Until the afternoon of December 14, 1931, at 5:30, when they found Rachel’s naked body, she was murdered in the bathtub of an apartment located at Calle San Miguel, Number 38 and ½ Amistad corner. Next to it was the famous Astor Hotel. The robed corpse of the whore floated face up in the bloody water. Her skull was shattered.
Dr. Reynaldo Villiers signed the death certificate, issued at the Casa de Socorro. There it is established that death occurred about forty hours before the discovery.
The edition of the newspaper “El Mundo” of December 15, 1931, pointed out that the most intriguing thing about the murder of Rachel Dekeirsgeiter is that the door of the house was bolted. In order for the police to enter, they had to rape her. The apartment was on the third floor, so it was not explained how the murderer got out.
MURDER, “PERFECT CRIME”
Alberto Jiménez Rebollar was the only one prosecuted for the crime. The defense of the musician was assumed by the prominent criminalist Dr. Carlos Manuel Palma «Palmita». The lawyer masterfully defended Jiménez, who was found not guilty. The singer then turned to journalism. Nor could Villaverde be proven guilty, who was advised by a young lawyer named Miguel Ángel Suárez Fernández.
No one was convicted of the cabaret’s death. It could be said that it was a “perfect crime”, since the murder weapon was not found or the motive for the mysterious and bloody event was clarified. Nor did they find any traces that gave away the author. Rachel’s murder went unpunished and soon the press stopped covering her. More resonance had the murder of Lola, “the Creole Messalina” who “was killed at 3.”
Of course, they also put lyrics and music to this famous crime. The tango «La Francesita Rachel», by Armando Valdespí immortalized the tragedy. Years later, the song, this time performed by Miguel Ángel Piña and the Siglo XX orchestra, was part of the soundtrack of a film made in 1973. The film was entitled “The strange case of Rachel K.” and directed by Oscar Valdés.
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EL MISTERIOSO “CRIMEN PERFECTO” EN LA HABANA DE RACHEL “LA ROSA DE FRANCIA”.
Corrian los primeros tres meses de fundada nuestra republica (Diciembre 1931) cuando toda Cuba se vió conmocionada tras uno de los sucesos criminales más resonados en toda la isla y fue el asesinato de Rachel Dekeirsgeiter, una bellísima joven que ejercía la prostitución en La Habana y que estaba muy ligada a la vida de la farándula y del espectáculo.
RACHEL LLEGA A CUBA
Rachel Dekeirsgeiter llegó a La Habana procedente de Francia de la mano de Oscar Villaverde, uno de los que trajo a la capital cubana jóvenes que ejercieron la profesión de “sosteneur”.
A “la Rosa de Francia” se la describe como bellísima, sofisticada y muy solicitada por los hombres, incluyendo a Villaverde, quien la hizo su amante oficial. Rachel se pavoneaba con todo aquel que le diera dinero, provocando riñas frecuentes entre los habaneros que disputaban sus favores.
Oscar Villaverde era el propietario del afamado cabaret Tokio, en la esquina San Lázaro y Blanco. En este centro nocturno también cantaba Alberto Jiménez Rebollar. Le acompañaba la excelente música de la orquesta que dirigía José Antonio Curbelo. Corrían rumores que aseguraban Jiménez también era amante de Rachel. La francesa ejercía en el Tokio la profesión más antigua del mundo.
RACHEL DESAPARECE
Pero en diciembre de 1931, la hermosa francesa, de 30 años de edad, desapareció. Por dos días no se supo nada de ella. Hasta la tarde del 14 de diciembre de 1931, a las 5:30, cuando encontraron el cuerpo desnudo de Rachel, asesinada en la bañera de un departamento situado en la calle San Miguel, Número 38 y ½ esquina Amistad. Al lado quedaba el famoso Hotel Astor. El cadáver sin ropas de la meretriz flotaba boca arriba en el agua ensangrentada. Su cráneo estaba destrozado.
El doctor Reynaldo Villiers firmó el certificado de defunción, expedido en la Casa de Socorros. Allí se establece que la muerte ocurrió unas cuarenta horas antes del hallazgo.
La edición del periódico «El Mundo» del 15 de diciembre de 1931, señalaba que lo más intrigante del asesinato de Rachel Dekeirsgeiter es que la puerta de la vivienda estaba cerrada con pestillo. Para que la policía pudiera entrar tuvieron que violentarla. El departamento estaba en el tercer piso, por lo que no se explicaba cómo pudo salir el asesino.
ASESINATO, “CRIMEN PERFECTO”
Alberto Jiménez Rebollar fue el único procesado por el crimen. La defensa del músico la asumió el destacado criminalista doctor Carlos Manuel Palma «Palmita». El abogado defendió magistralmente a Jiménez, a quien declararon inocente. El cantante luego se dedicó al periodismo. Tampoco se pudo demostrar la culpabilidad de Villaverde, a quien le asesoró un joven abogado, llamado Miguel Ángel Suárez Fernández.
Nadie fue condenado por la muerte de la cabaretera. Podría decirse que se trató de un “crimen perfecto», ya que no encontraron el arma homicida ni se aclaró el móvil del misterioso y sangriento hecho. Tampoco encontraron huellas que delataran al autor. El asesinato de Rachel quedó impune y al poco tiempo la prensa dejó de darle cobertura. Más resonancia tuvo el homicidio de Lola, “la Mesalina criolla” a la que «mataron a las 3».
Eso sí, también a este famoso crimen le pusieron letra y música. El tango «La Francesita Rachel», de Armando Valdespí inmortalizó la tragedia. Años más tarde, la canción, esta vez interpretada por Miguel Ángel Piña y la orquesta Siglo XX, formó parte de la banda sonora de una película realizada en 1973. La cinta llevó el título de «El extraño caso de Rachel K.», escrita y dirigida por Oscar Valdés.
Agencies/ TodoCuba/ Extractos/ Excerpts/ Internet Photos/ Arnoldo Varona/ www.TheCubanHistory.com
THE CUBAN HISTORY, HOLLYWOOD.
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