JARDINES de la Tropical, La Habana y su lamentable Estado de Decadencia. PHOTOS. * JARDINES de la Tropical, La Havana and its Pitable State of Decay. PHOTOS.JARDINES DE LA TROPICAL, LA HABANA Y SU LAMENTABLE ESTADO DE DECADENCIA. PHOTOS.
Los Jardines de la Tropical en la Habana es un espacio que está fuera de los itinerarios turísticos propiamente y sin embargo posee una belleza muy particular. Todas las intentadas grandes fiestass no han podido evitar que cayera en un lamentable estado de decadecia.
Construido a fines del siglo XIX por la familia Herrera, propietaria de la cervecería La Tropical, este jardín de placer cubano es ahora una joya algo abandonada en las afueras de La Habana. Con la intención de reflejar una exuberante propiedad española, Tropical Gardens, como se conoce el sitio en inglés, fue construido alrededor de 1912 y rápidamente se convirtió en un lugar de moda para la alta sociedad y las orquestas más populares de la época. En su mejor momento, los terrenos estaban salpicados de cascadas, miradores y un pequeño palacio al estilo de la Alhambra de Granada. También hubo un gran salón de baile capaz de entretener a unas 500 parejas enamoradas.
Quizás la estrategia comercial más efectiva de la primera mitad del siglo XX, fue la construcción de los Jardines de La Tropical, frutos de una extraordinaria industria hispano-cubana que estimuló el desarrollo fabril en Cuba con su empeño y su acertada política económica, por lo cual alcanzó gran excelencia, dentro y fuera de Cuba, con sus productos y servicios.
RECORRIENDO LOS JARDINES…
Los Jardines de la Tropical tienen por encanto adicional un palacete que recuerda los edificios nazaríes de la Alhambra de Granada, en España; escenario creado por la fabrica de la cerveza La Tropical en 1912, según unos datos, otros dicen en 1904.
El mercado habanero de ese entonces en busca de bebidas frías de máxima calidad pedía contrarrestar el clima tropical con líquidos de su gusto y así fue como surgió La Tropical.
Sus Jardines se encuentran en la ribera este del río Almendares, el de mayor extensión que atraviesa la ciudad-capital y posee 48,8 kilómetros de largo.
Ese complejo recreativo cuenta con interesantes objetos arquitectónicos integrados al exuberante paisaje natural que aun se conserva en muy buen estado.
En una terraza superior del área se edificó un castillo de estilo neoárabe con decorados interiores y una profusa ornamentación en techos y capiteles al estilo de los pabellones de La Alhambra de Granada.
A medida que la popularidad del exuberante espacio social decayó, las estructuras se deterioraron y muchas de las extravagantes florituras del jardín quedaron cubiertas de maleza. El sitio fue parcialmente renovado y varias empresas diferentes, incluidos clubes nocturnos y restaurantes, intentaron recuperar el favor de los jardines, pero ninguno de ellos se mantuvo.
La exquisitez de sus diseños y la calidad con que fueron realizados lo sitúan junto a los grandes exponentes de la arquitectura paisajista modernista internacional. Lo que fue posible gracias al ingenio de sus maestros de obras, que con tal obra pusieron en alza su buen oficio, rebatiendo con ello las actitudes de quienes los rechazaron”. De esa manera, fueron intensamente disfrutados por la sociedad habanera, cubana, y del mundo, pues la visita a los Jardines de La Tropical se convirtió en itinerario obligado para cualquier turista, igualmente, las guías y directorios comerciales del momento se hicieron eco de su belleza y del prestigio de su industria.
En su fuente exterior el agua brotaba, en sus tiempos originales, además de completarse con una ecléctica fachada, que más bien nos rememora un castillo medieval.
LOS JARDINES DE LA TROPICAL CON EL TIEMPO…
Durante los años 90 del pasado siglo tuvo este parque una reparación y el castillo se adaptó a restaurante, pero luego, las dificultades económicas hicieron el olvido.
Ahora, Los Jardines de la Tropical pertenece a la organización de Parques Metropolitanos de La Habana y se están realizando esfuerzos para preservar la verde historia tropical del sitio. Los conciertos de rock y los festivales de danza frecuentes se llevan a cabo en los terrenos, por lo que, si bien los esmoquin y las galas pueden haber desaparecido, las fiestas continúan.
Pese a esta peculiaridad del tiempo y el desamor de muchos humanos por la naturaleza, aun Los Jardines conservan un encanto en bruto muy especial que bien puede aprovecharse.
JARDINES DE LA TROPICAL, HAVANA AND ITS PITABLE STATE OF DECAY. PHOTOS.
Los Jardines de la Tropical in Havana is a space that is outside the tourist itineraries itself and yet has a very particular beauty. All the tried big parties have not been able to prevent it from falling into an unfortunate state of decadence.
Built-in the late 19th century by the Herrera family, owners of the La Tropical brewery, this Cuban pleasure garden is now a somewhat neglected gem on the outskirts of Havana. Intended to reflect a lush Spanish estate, Tropical Gardens, as the site is known in English, was built around 1912 and quickly became a hot spot for high society and the most popular orchestras of the day. In its prime, the grounds were dotted with waterfalls, gazebos, and a small palace in the style of Granada’s Alhambra. There was also a large ballroom capable of entertaining about 500 couples in love.
Perhaps the most effective commercial strategy of the first half of the 20th century was the construction of the Jardines de La Tropical, the result of an extraordinary Spanish-Cuban industry that stimulated manufacturing development in Cuba with its determination and sound economic policy, therefore which achieved great excellence, inside and outside Cuba, with its products and services.
WALKING THE GARDENS…
The Jardines de la Tropical have as an additional charm a small palace that recalls the Nasrid buildings of the Alhambra in Granada, in Spain; a scenario created by the La Tropical beer factory in 1912, according to some data, others say in 1904.
The Havana market at that time, in search of top-quality cold drinks, asked to counteract the tropical climate with liquids of their choice, and that is how La Tropical emerged.
Its Gardens are located on the east bank of the Almendares River, the longest that crosses the capital city and is 48.8 kilometers long.
This recreational complex has interesting architectural objects integrated into the exuberant natural landscape that is still in very good condition.
A neo-Arabic-style castle was built on an upper terrace in the area with interior decorations and profuse ornamentation on ceilings and capitals in the style of the pavilions of the Alhambra in Granada.
As the popularity of the lush social space waned, the structures fell into disrepair and many of the garden’s extravagant flourishes became overgrown. The site was partly renovated and several different businesses, including nightclubs and restaurants, attempted to regain favor with the gardens, but none of them held up.
The exquisiteness of his designs and the quality with which they were made place him alongside the great exponents of international modernist landscape architecture. What was possible thanks to the ingenuity of its master builders, who with such a work raised their good trade, thereby refuting the attitudes of those who rejected them. In this way, they were intensely enjoyed by Havana, Cuban, and world society, since the visit to the Jardines de La Tropical became an obligatory itinerary for any tourist, likewise, the guides and commercial directories of the moment echoed their beauty and the prestige of his industry.
In its external source the water gushed, in its original times, in addition to being completed with an eclectic façade, which rather reminds us of a medieval castle.
THE GARDENS OF LA TROPICAL OVER TIME…
During the 90s of the last century, this park underwent repairs and the castle was adapted as a restaurant, but later, economic difficulties made it forgotten.
Now, Los Jardines de la Tropical belongs to the Havana Metropolitan Parks organization and efforts are underway to preserve the verdant tropical history of the site. Rock concerts and frequent dance festivals occur on the grounds, so while the tuxedos and finery may be gone, the festivities continue.
Despite this peculiarity of time and the lack of love of many humans for nature, even Los Jardines retains a very special raw charm that can be well taken advantage of.
Agencies/ Wiki/ QuintaEsencia/L.Campos/A.Rodriguez/ Internet Photos/ Arnoldo Varona/ www.TheCubanHistory.com
THE CUBAN HISTORY, HOLLYWOOD.
