JUANA BACALLAO “JUANA LA CUBANA”, SHOWWOMAN DE CUBA, UN ESPECTACULO TEATRAL.
Neris Amelia Martínez Salazar nació el 26 de mayo de 1925 en el seno de una familia humilde en la populosa barriada de Cayo Hueso, en La Habana. Su padre fue trabajador del muelle. Hija única, quedó huérfana de ambos progenitores a los seis años y fue internada en una escuela de monjas de las Hermanas Oblatas. Desde temprana edad tuvo que luchar y defenderse sola. No estudió música pero toca el piano y las tumbadoras.
Neris trabajaba como empleada doméstica. Juana Bacallao, fue descubierta por Obdulio Morales cuando ella limpiaba unas escaleras en la esquina de Laguna y Perseverancia. Al escucharla cantar mientras hacía sus labores como doméstica, se detuvo y le dijo que le quería hacer una prueba para que trabajara en una producción titulada El Milagro de Ochún en el Teatro Martí, donde triunfaron otros grandes como Rita Montaner, Garrido y Piñeiro, Candita Quintana, Alicia Rico y allí entre todas aquellas estrellas de aquel momento, apareció o nació Juana Bacallao.
La Diosa negra de los cabarets cubanos. En su modo de interpretar combina letras de canciones con textos burlescos o trágicos, grandilocuente gestualidad y extravagante vestuario. Única en su estilo, ha marcado un hito en la historia del cabaret cubano, desde los 50′ hasta la actualidad. Nadie como ella ha cantado con tanta gracia y enjundia nacionales aquellas estrofas de:
Yo soy Juana Bacallao
Yo soy Juanita Bacallao
La negra que en el bembé
Salpica pa no mojar
Actuaciones en Cuba y el extranjero
Trabajó en el Hotel Capri en un espectáculo que se llamaba La Serenata, con Meme Solís, Moraima Secada y Celeste Mendoza, y en otra producción de un gran éxito La Caperucita se divierte. Otras actuaciones de Juana fueron en el Teatro Campoamor, Los Aires Libres de Prado, los cabarets Sans Sousi, Tropicana, Copa Room del Riviera, Parisien del Hotel Nacional de Cuba, Salón Rojo del Capri, Caribe del Hotel Habana Libre, el Bar Alí y Palermo.
Juana Bacallao ha sido aplaudida en escenarios importantes, pero ella siempre desea volver a sus escenarios, a los cubanos, donde se convirtió en la figura que es hoy en día. A lo largo de su carrera se presentó junto a personalidades de la talla de Nat King Cole, Bola de Nieve, Celeste Mendoza, Ninon Sevilla, Cantinflas, Rosita Fornés, Celia Cruz, Omara Portuondo, Rafaela Carrá, Benny Moré, Chano Pozo y Elena Burque.
Conoció Estados Unidos, Francia, México, Venezuela, República Dominicana y España.
En París, Juana Bacallao apareció en la Opéra-Comique en tres ocasiones, cada una de ellas fue un éxito rotundo.
En 2005 se presentó Juana con su agrupación’ Tiembla Tierra’ en la Ciudad de México con un espectáculo titulado Tiembla Tierra, dirigido por Armando Guerra Sarduy, donde compartió la escena con el conocido intérprete Nelson Ned.
Aún en 2016, la podemos encontrar presentando su show en el Club Gato Tuerto junto a jóvenes figuras como Osdalgia Lesmes.
Antes de 1959 sus apariciones teatrales provocaban una verdadera guerra con la gente del gallinero y sus incursiones en las fiestas carnavalescas de provincia eran siempre un suceso que se agradecía de buena gana. Después del 59 durante muchos años los estudios de televisión tampoco la recibieron: se le consideraba representante de una sub cultura, vulgar, chabacana, inapropiada.
Continuó actuando en los centros nocturnos, moviéndose por provincias, animando fiestas de carnaval, pero lejos, muy lejos, de los órganos de difusión: nada de televisión, ni de radio, ni de discos, ni de grandes teatros. Sin embargo, Juana Bacallao era conocida, popular, admirada y querida. ¿Cómo logró? Pues con un sentido del marketing único y muy personal.
En los tiempos en que nadie imaginaba que alguna vez se inventarían los celulares ella llevaba siempre en la cartera el auricular de un teléfono convencional. En cuanto llegaba a un lugar donde se reunía un grupo considerable de personas, abría la cartera, sacaba el auricular y comenzaba a hablar y a dar órdenes diversas: Ténganme lista la comida que ya voy para allá… Díganle al peluquero que me espere… No encuentro la dirección ¿me la puedes repetir? etc., etc., etc.… A la hora de cruzar la calle Juana esperaba disciplinadamente el cambio de la luz. En cuanto ponían la luz roja emprendía el cruce, el rostro vuelto hacia los autos que se habían detenido, una sonrisa en los labios y… ¡Gracias! ¡Muy amables! ¡Gracias! como si todos se hubieran detenido para que ella pasara. En la noche, cuando se encontraba con alguien que le decía que hacía mucho tiempo no la veía, ella contestaba a toda voz: Yo no salgo de día, porque las estrellas solo salimos de noche.
https://youtu.be/JdLccVfEcBE
El vestuario siempre fue el más llamativo y estrambótico que uno pudiera imaginarse, aunque para ser justos hay que decir que siempre vistió ropa de calidad. Sus pelucas, sus empinados tacones, sus largos pendientes, los botines plateados recorrieron con ella las más céntricas calles de La Habana. Y fue así como Juana Bacallao se convirtió en un personaje citadino muy popular.
Pero las batallas siempre acarrean adversidades. Y a ella le tocó la suya. Vivió una época oscura y triste: el alcohol le impuso una dependencia lastimera. Por esos tiempos no siempre estaba tan acicalada como de costumbre. Recorría las principales calles del Vedado en un estado lamentable. Hasta que un buen día despareció y otro, mucho mejor, reapareció totalmente curada de un mal en el que nunca más ha sucumbido. Recuperó su fuerza, regresó a su entorno vital, emprendió esas noches de trabajo duro frente al público del cabaret, el más agradecido y el más implacable. Se erigió, con valentía, sobre el tiempo malgastado. Volvió a ser ella y mucho más.
Desde que estrenó la guaracha compuesta por Obdulio Morales, perdió su nombre de pila para convertirse en Juana Bacallao. Y no importa si fue a ella o no, a quien le compusieron la canción, si la conocen o la admiran o es una invención suya o de cualquier otra persona. Pero a estas alturas de su larga vida ya ha dejado de ser hace mucho tiempo Amelia Martínez, como irá dejando de ser Juana Bacallao… para pasar a la posteridad, en la imaginación y la realidad como lo que siempre ha sido. Así, sencillamente: Juana… la cubana.
Sin lugar a dudas, Juana Bacallao es un fenómeno de esos que encierra el misterio de la propia vida, Juana es auténtica, plenamente realizada, sin frustraciones, honesta consigo mismo y con los demás, es por encima de todo, simple y sencillamente eso, ¡Cubanísima!
Cónyuge: Armando Guerra Sarduy.
En su larga carrera obtuvo diversos premios y reconocimientos.
Distinción por la Cultura Nacional.
Medalla “Alejo Carpentier”
Disco de Oro en Canadá
JUANA BACALLAO “JUANA LA CUBANA”, SHOWWOMAN OF CUBA, AN ENTERTAINMENT SPECTACULAR.
Neris Amelia Martínez Salazar was born on May 26, 1925, in a humble family in the populous neighborhood of Key West, in Havana. His father was a dock worker. An only child, she was orphaned by both parents at age six and was admitted to a nun school of the Oblate Sisters. From an early age, he had to fight and defend himself. He didn’t study music but he plays the piano and the tumbadoras.
Neris worked as a maid. Juana Bacallao was discovered by Obdulio Morales when she cleaned some stairs at the corner of Laguna and Perseverancia. When he heard her sing while doing her housework, she stopped and told him that she wanted to do a test to work in a production entitled El Milagro de Ochún at the Teatro Martí, where other greats such as Rita Montaner, Garrido, and Piñeiro, Candita triumphed Quintana, Alicia Rico and there among all those stars of that moment, Juana Bacallao appeared or was born.
The black Goddess of the Cuban cabarets. In his way of interpreting she combines song lyrics with burlesque or tragic texts, grandiose gestures and extravagant costumes. Unique in its style, it has marked a milestone in the history of Cuban cabaret, from the 50 ‘to the present. No one like her has sung with such national grace and substance those stanzas of:
I am Juana Bacallao
I am Juanita Bacallao
The black one in the baby
Splashes not to get wet
Performances in Cuba and abroad
She worked at the Hotel Capri in a show called La Serenata, with Meme Solís, Moraima Secada and Celeste Mendoza, and in another highly successful production, Little Red Riding Hood has fun. Other performances by Juana were at the Campoamor Theater, Los Aires Libres de Prado, the cabarets Sans Sousi, Tropicana, Copa Room del Riviera, Parisien of the National Hotel of Cuba, Red Room of the Capri, the Caribbean of the Hotel Habana Libre, the Bar Ali, and Palermo.
Juana Bacallao has been applauded in important settings, but she always wants to return to her scenarios, to the Cubans, where she became the figure she is today. Throughout his career, he appeared alongside personalities such as Nat King Cole, Snowball, Celeste Mendoza, Ninon Sevilla, Cantinflas, Celia Cruz, Rosita Fornés, Omara Portuondo, Rafaela Carrá, Benny Moré, Chano Pozo and Elena Burque.
She met the United States, France, Mexico, Venezuela, Dominican Republic, and Spain.
In Paris, Juana Bacallao appeared in the Opéra-Comique three times, each of them was a resounding success.
In 2005 Juana appeared with her group ‘Tiembla Tierra’ in Mexico City with a show entitled Tiembla Tierra, directed by Armando Guerra Sarduy, where she shared the scene with the well-known performer Nelson Ned.
Even in 2016, we can find her presenting her show at Club Gato Tuerto with young figures like Osdalgia Lesmes.
Before 1959 his theatrical appearances caused a real war with the people of the chicken coop and his incursions into the carnival festivals of the province were always an event that was gratefully appreciated. After 59 years, television studios did not receive it either: he was considered a representative of a subculture, vulgar, chabacana, inappropriate.
She continued acting in the nightclubs, moving around the provinces, encouraging carnival parties, but far, far away, from the broadcasting organs: nothing from television, nor from radio, nor from records, nor from great theaters. However, Juana Bacallao was known, popular, admired and loved. How did he achieve? Well, with a unique and very personal sense of marketing.
In the days when nobody imagined that cell phones would ever be invented, she always carried the handset of the conventional telephone in her wallet. As soon as I arrived at a place where a considerable group of people met, opened the wallet, took out the headset and began to speak and give various orders: Have me ready the food that I am already going there … Tell the hairdresser to wait for me … I can not find Can you repeat the address? etc., etc., etc.… When it came to crossing Juana Street, I was disciplined waiting for the light to change. As soon as they turned the red light on, they started crossing, their faces turned to the cars that had stopped, a smile on their lips and … Thank you! Very kind! Thank you! as if everyone had stopped for her to pass. At night, when he met someone who told him that he had not seen her for a long time, she answered in a loud voice: I don’t go out during the day, because the stars only come out at night.
The costumes were always the most striking and outlandish that one could imagine, although to be fair it must be said that he always wore quality clothes. Her wigs, her steep heels, her long earrings, the silver ankle boots traveled with her the most central streets of Havana. And that was how Juana Bacallao became a very popular city character.
But battles always bring adversities. And she got his. He lived a dark and sad time: alcohol imposed a pitiful dependence on him. At that time I was not always as groomed as usual. It traveled the main streets of Vedado in an unfortunate state. Until one good day disappeared and another, much better, reappeared completely cured of an evil in which he has never succumbed. He regained his strength, returned to his vital environment, undertook those nights of hard work in front of the cabaret audience, the most grateful and the most implacable. It was erected, bravely, about wasted time. She was again and much more.
Since he released the guaracha composed by Obdulio Morales, he lost his first name to become Juana Bacallao. And it doesn’t matter if it was her or not, who composed the song if they know or admire her or it is an invention of her or anyone else’s. But at this point in her long life, Amelia Martínez has stopped being a long time ago, as Juana Bacallao will cease to be … to move on to posterity, in imagination and reality as she has always been. Thus, simply: Juana … the Cuban.
Without a doubt, Juana Bacallao is a phenomenon of those that enclose the mystery of her own life, Juana is authentic, fully realized, without frustrations, honest with herself and with others, it is above all, simply and simply that, Cuban Cuban!
Spouse: Armando Guerra Sarduy.
Agencies/ Wiki/ Ecured/ Internet Photos/ YouTube/ Arnoldo Varona/ www.TheCubanHistory.com
THE CUBAN HSTORY, HOLLYWOOD.