SINCRETISMO CUBANO: OCHÚN O LA VIRGEN DE LA CARIDAD DEL COBRE
“Ochún”, orisha mayor en la cultura afro-cubana se sincretiza con la Virgen de la Caridad del Cobre, patrona de la Isla y venerada por los cubanos desde hace siglos. Son famosas desde el siglo XIX las peregrinaciones al santuario de la Caridad, en el poblado de El Cobre, cercano a la ciudad de Santiago de Cuba.
Cuentan que alrededor de 1620 dos indios, Juan de Hoyos y Juan Moreno, y un negrito criollo, Rodrigo, fueron a buscar sal a la bahía de Nipe. Estando ya en el mar, en una canoa, vieron aparecer una imagen tallada en madera de la Virgen María que flotaba sobre una tabla.
La imagen de la Virgen llevaba en el brazo izquierdo al niño Jesús y en el derecho una cruz de oro, en la tabla había una inscripción que decía: Yo soy la Virgen de la Caridad. La recogieron y la llevaron al hato de Barajagua, donde el administrador de una de las minas de cobre ordenó construirle una ermita. El 10 de mayo de 1916 Benedicto XV la declaró Patrona de Cuba.
IDENTIFICACION EN EL SINCRETISMO.
COLOR: Amarillo (en todas sus variantes hasta el ocre), también se le atribuyen los colarinos y los verdes agua.
NÚMERO: 5 y sus múltiplos.
MATERIALES: Bronce, latón, oro y otros metales amarillos.
ATRIBUTOS: Flores amarillas, miel, corales redondos, abanico de plumas de pavoreal, camarones, espejos, joyas y todo objeto del tocador femenino, sábanas, paños bordados, marugas, pañuelos, güiro en forma de sonaja cuyo sonido encanta a Ochún.
COLLARES: Llevan cuentas amarillas o de ámbar.
ROPA: Bata amarilla que lleva cinto y peto en forma de rombo sobre el vientre. En el borde de la falda lleva cascabeles pequeños colgando.
OCHÚN EN LA CULTURA AFRO-CUBANA.
Orisha mayor. Dueña de las aguas dulces, de los ríos y manantiales. Orisha de la feminidad, el sensualismo y del amor. Diosa de la miel, el oro y del dinero.
Orisha coqueta y provocadora, cuida del fuego del hogar y del vientre de las mujeres. Mujer de Changó e íntima amiga de Elegguá, que la protege. Se representa como una mulata bella, simpática, buena bailadora, fiestera y eternamente alegre. Es provocadora y suele propiciar riñas entre los orishas y los hombres.
Hay un ‘patakín’ o Leyenda que cuenta cómo una vez Olodumare se llevó todas las aguas para castigo de los hombres. Los ríos y las lagunas se secaron, los peces, los animales y los hombres morían de sed. Ifá puso en un ceso ofrendas que debían conducirse al cielo, Ochún se encargó de ello. Por el camino se encontró a Elegguá y le entregó aguja e hilos, luego se encontró con Obatalá y le regaló los huevos que llevaba, Obatalá en reciprocidad, le indicó donde estaba la puerta del cielo. Al llegar al cielo, Ochún vió que una gran cantidad de niños cuidaban la puerta de entrada y les repartió dulces para que la dejaran entrar. Olodumare la oyó y accedió a dejar caer la lluvia de nuevo sobre la tierra. Se llenaron los ríos y la naturaleza revivió en todo su esplendor.
A la bella Ochún le gustaba pasearse por el monte, donde bailando y cantando, jugaba con los animales quienes la respetaban y ni el alacrán la picaba. Oggún un día la vió pasar y quedó prendado de su belleza, sin poder contenerse la persiguió para poseerla. Ochún, que a quien amaba era a Changó, huyó del fiero Oggún atravesando por los montes hasta llegar al río al cual se lanzó y se dejó llevar por la corriente llegando a la desembocadura con el mar. Es aquí donde se tropezó con la poderosa Yemayá, quien se compadeció de ella y la protegió. Yemayá la regaló entonces a Ochún el río para que viviera en él y para alegrarla, la cubrió de joyas, corales y otras riquezas. Por esto es que Ochún vive en el río y quiere tanto a Yemayá.
Se dice que con Changó tuvo amores muy ardientes y éste siempre la prefirió. A Obba, legítima esposa de Changó, la traicionó Ochún cuando le aconsejó que se cortará las orejas para preparar el Kalulú, plato favorito del dios del trueno, esto le costó a Obba ser repudiada por su esposo. Ochún tuvo amores también con Agayú, que la conoció como sinera en el río.
COMIDAS FAVORITAS: Frijoles caritas cocidos con cáscara y sal con mucho ajo y cebolla, frijoles carita cocidos sin adobo, gofio con miel, melado, caramelos, naranjas dulces de China, alegrías de coco y todo tipo de dulces, arroz amarillo, harina de maiz, todos los peces y mariscos del rio, ahumados, la comida se sazona con almendros, berro, canistel, espinaca, perejil, boniato y calabaza.
ANIMALES: gallos, palomas, guineos, jicotea, chivos castrados, gallinas, codornices, pavo reales, canarios.
RECEPTÁCULO: Sopera multicolor, con predominio del amarillo, llena de agua del río y cinco piedras recogidas al amanecer del fondo de un río guardadas en tinaja de barro.
HIJOS: Los hijos de Ochún son simpáticos y fiesteros. En el fondo son voluntariosos y con grandes deseos de ascender socialmente, por eso disfrazan su gran sensualidad por el deseo de integrarse lo mejor posible a la opinión pública. Aman las joyas, los perfumes y la buena ropa.
CUBAN SINCRETISM: OCHÚN OR THE CHARITY VIRGIN OF COBRE
“Ochún”, the greatest orisha in Afro-Cuban culture, is syncretized with the Virgen de la Caridad del Cobre, patron saint of the island and venerated by Cubans for centuries. Pilgrimages to the Sanctuary of La Caridad, in the town of El Cobre, close to the city of Santiago de Cuba, have been famous since the 19th century.
They say that around 1620 two Indians, Juan de Hoyos, and Juan Moreno, and a Creole black man, Rodrigo, went to look for salt in the Bay of Nipe. While already at sea, in a canoe, they saw an image appear carved in wood of the Virgin Mary floating on aboard.
The image of the Virgin carried the baby Jesus on the left arm and on the right a golden cross, on the table, there was an inscription that said: I am the Virgin of Charity. They picked her up and took her to the Barajagua herd, where the administrator of one of the copper mines ordered her to build a hermitage. On May 10, 1916, Benedict XV declared her Patroness of Cuba.
COLOR: Yellow (in all its variants up to the ocre), the colarinos and the green water are also attributed.
NUMBER: 5 and its multiples.
MATERIALS: Bronze, brass, gold, and other yellow metals.
ATTRIBUTES: Yellow flowers, honey, round corals, a fan of peacock feathers, shrimp, mirrors, jewelry, and every object of the feminine dressing table, sheets, embroidered cloths, marugas, handkerchiefs, güiro in the form of a rattle whose sound enchants Ochún.
NECKLACES: They have yellow or amber beads.
CLOTHING: Yellow gown that has a belt and breastplate in the shape of a rhombus on the belly. On the edge of the skirt, there are small bells hanging.
OCHÚN IN THE AFRO-CUBAN CULTURE .
Greater Orisha. Owner of freshwaters, rivers, and springs. Orisha of femininity, sensualism, and love. Goddess of honey, gold, and money.
Flirty and provocative Orisha, take care of the hearth fire and the womb of women. Changó’s wife and close friend of Elegguá, who protects her. She is represented as a beautiful, sympathetic mulatto, good dancer, party girl, and eternally happy. It is provocative and often leads to quarrels between the orishas and men.
There is a ‘patakín’ or Legend that tells how once Olodumare took all the waters to punish men. The rivers and the lagoons dried up, the fish, the animals, and the men died of thirst. Ifá put in offerings that were to be taken to heaven, Ochún took care of it. On the way she met Elegguá and gave her a needle and threads, then she met Obatalá and gave her the eggs she was carrying, Obatalá in reciprocity, indicated her where the door of heaven was. Upon reaching heaven, Ochún saw that a large number of children were guarding the front door and distributed sweets to let them in. Olodumare heard her and agreed to drop the rain back on the ground. The rivers were filled and nature revived in all its splendor.
The beautiful Ochún liked to walk through the mountains, where dancing and singing, she played with the animals who respected her and not even the scorpion bit her. Oggún one day saw her pass and was captivated by her beauty, unable to contain himself, he pursued her to possess her. Ochún, who he loved was Changó, fled from the fierce Oggún crossing the mountains until he reached the river where he launched himself and let himself be carried by the current, reaching the mouth with the sea. It is here that he encountered the powerful Yemayá, who took pity on her and protected her. Yemayá then gave it to Ochún for the river to live in and to cheer her up, she covered it with jewels, corals, and other riches. This is why Ochún lives in the river and loves Yemayá so much.
It is said that with Changó he had very ardent loves and he always preferred her. Obba, the legitimate wife of Changó, was betrayed by Ochún when he advised her to cut her ears to prepare Kalulú, the god of thunder’s favorite dish, this cost Obba to be repudiated by her husband. Ochún also had loved with Agayú, who knew her as a sinera in the river.
FAVORITE FOODS: Caritas beans cooked in shell and salt with lots of garlic and onions, Carita beans cooked without marinade, gofio with honey, molasses, caramels, sweet Chinese oranges, coconut joys and all kinds of sweets, yellow rice, cornmeal, all the fish and seafood from the river, smoked, the food is seasoned with almond, watercress, canistel, spinach, parsley, sweet potato, and squash.
ANIMALS: roosters, pigeons, bananas, jicotea, castrated goats, chickens, quail, peacocks, canaries.
RECEPTACLE: Multicolor tureen, with a predominance of yellow, filled with river water and five stones collected at dawn from the bottom of a river, stored in a clay jar.
CHILDREN: The children of Ochún are nice and partiers. Basically they are willful and with great desire to ascend socially, that is why they disguise their great sensuality by the desire to integrate themselves as well as possible with public opinion. They love jewelry, perfumes, and good clothes.
Agencies/ Conexion Cubana/ Pancrasia/ Internet Photos/ YouTube/ Arnoldo Varona/ www.TheCubanHistory.com
THE CUBAN HISTORY/ HOLLYWOOD.